Condenable no sólo por la Iglesia católica, sino por todas las ideologías

Puebla, Pue.- El aborto, tema tan discutido desde siempre y en la actualidad, es el peor crimen que cometen no sólo la mujer que lo realiza, sino también sus cómplices que la ayudan a consumarlo.

Aclaró el Arzobispo de Puebla, Víctor Sánchez Espinosa, en su homilía dominical en Catedral, que abortar es causar directamente la muerte de un ser vivo e indefenso que se halla en el seno materno y que empezó a existir desde el momento mismo de la concepción.

Lo que discuten muchas mujeres es que días antes o días antes después de los 2 meses de iniciado el embarazo, todavía no tiene vida el nuevo ser y puede ser abortado. Error que declaran científicos, teólogos y creyentes de ideas humanas y religiosas, al asegurar que la vida de todo ser humano empieza desde el momento de la concepción.

Detalló Monseñor Víctor Sánchez que el crimen por aborto no lo comete sólo la mujer, sino quienes la ayudan a consumarlo, como son los médicos cirujanos que ´´ártienden´´ a la abortante, las enfermeras, las ´´comadronas´´, los dueños  de clínicas u hospitales donde de practican  abortos.

Se consideran igualmente cómplices de este crimen los conductores que saben qué ´´pacientes´´ llevan a abortar;  los ciudadanos –mujeres y hombres- que ´´defienden´´´el aborto, y las autoridades que proclaman y hasta legislan contra la penalización de este crrimen.

El párroco Alfredo Rodríguez Cárcamo, titular de la parroquia de la Virgen de Los Desamparados, se refirió al mismo tema del aborto, declarando  igualmente que es un pecado grave que muchas mujeres no lo consideran tal,  y en muchos casos ni como pecado.

Explicó que en este tiempo de Cuaresma se recomienda a todos los feligreses frecuentar el sacramento de la confesión, y que para hacer buena confesión es importante y necesario el previo examen de conciencia, ya que en la actualidad hay penitentes que consideran diversos actos que no son pecado, como pecados que deben confesar; y varios pecados graves     que no los consideran así.

Detalló que para que haya pecado, debe haber pleno conocimiento de las acciones que se practican; pleno conocimiento y daño grave contra uno mismo o contra el prójimo.  


Publicado en NACIONAL