Columna | P U L S O    P O L I T I C O

          Con una participación escasa de priístas poblanos, apenas 130 mil votantes de los más de 653 mil empadronados, fue electo Alejandro Moreno Cárdenas, “Alito”, como presidente del Comité Ejecutivo Nacional del PRI, resultado que estuvo previsto, como siempre ocurre en el Revolucionario Institucional, desde el principio del proceso.

           Moreno Cárdenas, ex gobernador de Campeche, obtuvo 104 mil936 votos en las 590  mesas de recepción instaladas en el estado.

          Ivonne Ortega, la ex gobernadora de Yucatán, obtuvo en Puebla 17 mil 861 votos quedando en segundo lugar y Lorena Piñón, la más desconocida de los aspirantes, se quedó con solo 6 mil 113 votos.

           Nacionalmente los resultados fueron similares: Alito obtuvo el 59 por ciento de los votos emitidos; Ortega, el 9.1 por ciento y Lorena, el 2.9 por ciento.

           Si en algo ha sido acertado el PRI a través de su historia, es en atinarle a los resultados de sus votaciones internas.

            La primera de las participantes en la contienda en aceptar los resultados, fue Lorena Piñón, como lo dimos a conocer hace unos días en este espacio (ya estaba programada que fuera así) La más renuente a aceptar su derrota fue Ivonne Ortega, que habló durante su campaña, de estar arreglado ya el triunfo del gobernador con licencia de Campeche.

            Se afirma que del padrón de casi siete millones de priístas, avalado por el INE, votaron cerca de 2 millones.

            A través de las redes, fueron denunciadas numerosas anomalías en el proceso de elección de la dirigencia priísta, algo normal, pues si no hubiera habido anomalías, pocos hubieran creído que fue una elección priísta.

            En Puebla el dirigente estatal, Lorenzo Rivera, dio una conferencia ayer en la mañana, para informar de los resultados obtenidos en Puebla.

             En la ciudad de México, Ivonne Ortega citó a una conferencia de medios, que finalmente fue suspendida.

              Miguel Angel Osorio Chong, ex secretario de Gobernación federal y actual coordinador de la fracción priísta del Senado, afirmó ayer, después de emitir su voto, que su partido es el “más democrático del país”.

               Dijo que era vital, para lograr el fortalecimiento del Revolucionario Institucional, después del descalabró que sufrió en el 2018, consultar a las bases y a la ciudadanía en general quien debería ser el nuevo dirigente.

               Consideró que en el 2021, el PRI obtendrá mejores resultados en las urnas con la estrategia de consultar más a las bases y el trabajo por tierra. La estrategia es regresar a ver a la militancia y, por supuesto mostrar que se puede ser mejor gobierno que el que ahora está.

                La propuesta de Morena, de reducir las prerrogativas a los partidos políticos, fue señalada como “preocupante” por el ex titular de Gobernación, porque eso significaría reducir la presencia de los partidos de oposición.

                El estilo de gobernar del actual jefe del ejecutivo de Puebla, Luis Miguel Barbosa Huerta, está gustando a muchos poblanos. Contrario a lo que ocurría antes, enfrenta los problemas, toma al toro por los cuernos, nos dicen, e incluso ha atendido a grupos que protestan frente a casa Aguayo, saliendo él a hablar con ellos y pidiéndoles que formen una comisión para dialogar con él sobre el asunto en cuestión.

                Su visita, a los municipios de Cohuecan y Tepexco, escenario del linchamiento de siete personas, fue calificada por muchos de “imprudente” y sin embargo, constituyó un éxito.

                  Sabía que la reacción del pueblo ante un caso de secuestro, tan violento, tenía como causa el abandono en que las autoridades locales habían tenido a esa zona del estado, lo que no justifica, señaló, crímenes como los que ahí se cometieron.

                   Desde hacía ocho años, ningún gobernante estatal, había visitado esos municipios y ahora tuvo que hacerlo en situación difícil para advertir que no se permitirán violaciones al estado de derecho, que debe prevalecer la paz y la concordia entre los pueblos del estado y para brindar apoyo inmediato para la solución de los problemas más sentidos de la población.

                    Más del 12 por ciento de los Jóvenes Trabajando para el Futuro, se inscribieron para realizar su aprendizaje en empresas agropecuarias, lo que es visto con entusiasmo, no solo por organizaciones de campesinos y ganaderos, sino por el mismo gobierno, pues si ha habido un sector abandonado por los jóvenes, ha sido el de la agricultura, la ganadería y sus derivados.

                    Varios miles de jóvenes se están capacitando en labores relacionadas con la producción de alimentos y se espera que esos jóvenes emprendan, al terminar su aprendizaje, trabajos como agricultores, ganaderos, avicultores, porcicultores, todo lo relacionado con la actividad agropecuaria, que tanta falta le hace al país, pues el abandono en que se ha tenido al campo, ha repercutido gravemente en la economía nacional haciéndonos un país dependiente, que tiene que importar productos como maíz, frijol, leche, carne, etc.