Columna | P U L S O    P O L I T I C O

              En el acto conmemorativo del inicio de la Revolución Mexicana, efectuado en la casa de los Hermanos Serdán, hoy museo de la Revolució, el gobernador Miguel Barbosa Huerta, expresó el orgullo de los poblanos de haber sido parte fundamental de dos transformaciones del país: el 5 de mayo de 1862 y el 18 de noviembre de 1910.

            Con la República Restaurada de Juárez, se afianzó la soberanía nacional y se constituyó el gobierno republicano y con la Revolución de 1910, se puso fin a una dictadura, la porfiriana, en la que prevalecían condiciones de vida muy similares a las que ahora confrontamos, dijo el jefe del ejecutivo estatal.

            La riqueza nacional en muy pocas manos, corrupción en el gobierno y enorme pobreza en el pueblo. La población estaba harta de los abusos de poder y puso punto final a las injusticias con una revolución.

            Hoy el voto ciudadano llevó al poder a un gobierno identificado con las aspiraciones populares para poner fin a los abusos, la corrupción, la delincuencia y la violencia, derivadas de las injusticias sociales que han provocado una profunda desigualdad entre los mexicanos y que son consecuencia del abandono de los ideales revolucionarios de 1910.

            El Jefe del Ejecutivo poblano, rindió homenaje a quienes iniciaron esta gesta Aquiles, Máximo y Carmen Serdán y a quienes junto con ellos, dieron inicio a la lucha por la Tercera Transformación.

            Pasando a otra cosa: el Partido Revolucionario Institucional, parece que ya le medio está agarrando la onda a su situación actual. Ya se dio cuenta, que nada va a lograr, si quiere salir del hoyo, poniendo al frente del “nuevo PRI”, a los mismos que lo hundieron.

           La composición de la delegación poblana que intervendrá en la elección de su dirigencia nacional y desde luego local, no ha agradado mucho a la militancia, pero bueno, hay jóvenes, algunos hijos de papi o de mámi, pero jóvenes al fin, que a la mejor se deciden a arreglar los terribles daños que dejaron sus padres en el Partido Revolucionario Institucional, al considerarlo como algo de su propiedad, haciendo lo que se les vino en gana, sin escuchar reclamos ni protestas de la militancia que solo era utilizada como carne de mitin.

            Para la presidencia estatal del PRI, suena un joven de 32 años, que a sus 25 fue presidente municipal de Quecholac y que actualmente ocupa un puesto en el comité estatal, después de haber participado como candidato a diputado suplente, tanto federal como local y de haber participado en actividades partidistas de diverso tipo.

          Se trata de Néstor Camarillo, que aparenta ser un buen prospecto, con entusiasmo, con amor por la causa y con deseos de hacer bien las cosas.

           No sabemos si tiene padrinos. Sí, que es hijo de un ex presidente municipal de Quecholac, pero el muchacho está alejado, nos cuentan del viejo sistema y quiere cambiar las cosas. Ojalá y lo logre.

            El ingeniero Alberto Jiménez Merino, un buen elemento que fue candidato a la gubernatura en las elecciones pasadas y que pese a los pesimistas pronósticos que se le auguraban, logró en poco tiempo y con muchas carencias, una votación respetable, también había sido mencionado para dirigir al PRI en la entidad, pero parece que hay algo mejor para él en la ciudad de México.

            La noticia de la detención en la ciudad de México del presidente municipal de Tehuacán Felipe Petjame, como que era esperada después de los desatinos que en el poco tiempo que lleva en el poder, había cometido.

            Nos dicen que el fue parte importante del morenvallismo en Tehuacán y que no saben como se coló a Morena para ser postulado como presidente municipal. El caso es que lo veían mal los panistas, porque decían que había traicionado al PAN; los morenovallistas, porque decían que había traicionado a esa fracción del PAN y los morenistas porque no lo consideraban parte de ellos.

            Ayer terminó el “buen fin” una campaña comercial que con descuentos en diversas mercancías, esperan tener buenas ventas los comerciantes, principalmente de las grandes tiendas.

             Esto indudablemente que beneficia a la economía en general, pero también resulta peligrosa porque mucha gente se endeuda más de lo conveniente o compromete sus ingresos por el aguinaldo de fin de año, en compras de productos que no necesita.

            Todo parece indicar que este tipo de ventas llegó para quedarse. Sería conveniente una campaña con el fin de educar al público en general, sobre como aprovechar los descuentos que en ciertas temporadas se hacen, para evitarse problemas graves en el futuro. Haciendo compras realmente necesarias o benéficas para el núcleo familiar y no gastar por gastar. ¿No cree usted?