Columna | P U L S O    P O L I T I C O

           Es más o menos conocido el dato de que la Fiscalía General del Estado, al ser asumida por el actual titular Gilberto Higuera Bernal, cuando su antecesor Víctor Carranca, se vio obligado a solicitar licencia por la presión social que exigía su destitución en el gobierno de Antonio Gali, por el pésimo papel que había venido desempeñando durante el gobierno morenovallista, que pretendió dejarlo en el puesto por varios años después de haber desempeñado el cargo durante su gobierno, tenía 90 mil expedientes sin resolver.

         Ese enorme atraso se debía, según nos comentan quienes saben, por la ineficiencia del propio ex funcionario; por la drástica eliminación de más de 600 oficinas de fiscalías distritales y auxiliares, y por el despido de un alto porcentaje de trabajadores entrenados en el desempeño de las funciones de la dependencia.

          La política era, reducir al máximo el número de denuncias de hechos ilícitos, para hacer creer que Puebla era un paraíso, donde la paz y la tranquilidad reinaban, en medio de la inseguridad y violencia que privaba en la mayor parte de las entidades del país, al grado de que parecía que la delincuencia y no el gobierno, tenían el control de todo.

              Bueno, pues el rezago no solo era en la Procuraduría, hoy Fiscalía. En la Secretaría del Trabajo, ahora a cargo del abogado laboralista Abelardo Cuellar, la situación fue muy similar.

               El nuevo funcionario (Morena) recibió a la dependencia con un rezago de 32 mil casos, en números redondos, entre ellos estaban el de varios miles de trabajadores del Estado, que fueron corridos injusta y arbitrariamente por el morenovallismo, casos que por órdenes terminantes del propio jefe del Ejecutivo, no avanzaban ni un milímetro.

              Se contaba con la complicidad del presidente de la Junta de Conciliación y Arbitraje, Ayala Corona, ahora preso acusado de exigir a los abogados laboralistas que tenían casos pendientes y que no avanzaban por maniobras del propio titular, que desde la era priísta, exigía parte del porcentaje que por concepto de liquidación, recibirían los demandantes. Ese funcionario gozaba de grandes influencias por el parentesco político con el líder cetemista Blás Chumacero Sánchez, de quien siempre fue protegido, pese a que como encargado del mantenimiento de la Unidad Habitacional La Margarita, hizo tan mal papel, que fue la causa de que el PRI perdiera el voto en esa unidad habitada por obreros cetemistas.

              Bueno, el caso es que los tiempos ya cambiaron y el ahora titular de la Secretaría del Trabajo, licenciado Cuellar, con el personal que le dejaron, está poniendo orden en la dependencia y asumiendo las funciones que dicha secretaría tiene asignadas, pero que nadie hacía intentos por ejercerlas, como las de buscar medios para capacitar a los jóvenes que quieren ingresar al mercado del trabajo, bien para emplearse o para trabajar por su cuenta y las de organizar cooperativas de producción y de consumo en las 32 regiones económicas en que está dividida la entidad.

             Cuando recibió la dependencia, hace menos de un año, había en la entidad 55 cooperativas en total y el propósito es de que en este gobierno queden debidamente organizadas y trabajando diez cooperativas de producción por cada distrito, es decir 320, que estarán conformadas por amas de casa, campesinos, artesanos, pequeños productores  de todas las actividades productivas que hay en la entidad.

            No se descuidará, por ningún motivo la atención a las demandas de los trabajadores por despidos, por incumplimiento de la Lesy Federal del Trabajo, etc.

            Se ha venido trabajando para reducir el rezago de la dependencia, pero están llegando continuamente denuncias por diversas violaciones a las leyes laborales pero ya se está agarrando el ritmo necesario para no sufrir más retrasos.

            Don Abelardo Cuellar, el titular de la dependencia, nos informó de un Foro, que ya tuvo una reunión y al que concurrieron, por haber sido invitados a ello, abogados laboralistas y de la función pública, funcionarios de algunas dependencias que tienen participacón tangencial con cuestiones laborales, líderes sindicales y trabajadores en general.

              La primera reunión tuvo lugar el 27 de febrero y se obtuvieron buenos resultados de ella. Se avanzó en el análisis de la problemática que enfrenta el medio laboral poblano y se determinó que hay que adoptar medidas para que una situación como la que ya se vivió, no vuelva a repetirse.

               Preguntamos al funcionario si con la reducción del 50 por ciento del personal de la dependencia, podrá cubrir todas las funciones que la secretaría a su cargo tiene encomendadas y su respuesta fue que sí. Que van a demostrar que con poco se puede hacer mucho, cuando hay deseos de contribuir a la solución de los grandes problemas del Estado y del país.

               Casos de empleados del gobierno estatal, que fueron despedidos arbitrariamente durante los gobiernos panistas, se han venido resolviendo ya y se nos dijo que hay la seguridad de que situaciones como las que dichos trabajadores vivieron, no volverán a repetirse. Las indicaciones del gobernador Miguel Barbosa, han sido muy claras en ese aspecto, señaló.