Columna | En Pocas Palabras

Hace 93 años, 4 de marzo de 1929, Plutarco Elías Calles fundó el Partido Nacional Revolucionario –PNR- , en marzo de 1938, Lázaro Cárdenas del Río, lo convirtió en Partido de la Revolución Mexicana –PRM- y años más tarde, en 1946, Manuel Ávila Camacho lo transformó  en el Partido Revolucionario Institucional –PRI-. Así hasta el año 2000 el priísmo gobernó México y sus actualmente 32 entidades como partido único.

Perdido el poder a principios de este siglo con el Partido Acción Nacional –PAN-, en 2012 recuperó la Presidencia de la República pero las administraciones federal y estatales le entraron a la corrupción con gran alegría  y ante el desencanto de los mexicanos, que en 2018, ante el “empuje” de un expriísta, que se convirtió en su máximo enemigo y luchó contra sus ex correligionarios, fundó el Movimiento de Regeneración Nacional, Morena, decidieron dar su voto y el triunfo al que dio la esperanza de tener un mejor país. El resultado lo estamos viviendo: ahora observamos que uno de los males de los pueblos es un gobierno formado por soberbios y como dijera el refrán “salió más caro el caldo que las albóndigas”. Como se observa, a excepción de los primeros 12 años del Siglo XXI, desde 1929 hemos sido gobernados por priístas y ex priístas como los que ahora ostentan el poder y vaya que les ha encantado utilizando las mismas armas: mentiras y más mentiras.

Veamos el caso PRI-Puebla, ahora que ya están en plena batalla preelectoral para el 2024 al igual que el resto de partidos políticos. Actualmente el gobernador es un ex priísta y ex perredista, Miguel Barbosa Huerta, de Morena. La candidatura por este Movimiento, se la pelean dos, otra vez, ex priístas: el diputado federal, Ignacio Mier Velasco, bajo la sombra del ex gobernador, tricolor para variar, Manuel Bartlett Díaz y el senador Alejandro Armenta Mier, cobijado por el también legislador, surgido del nonagenario PRI: Ricardo Monreal Ávila, casi abandonado por ya saben quién. Aún falta el que apuntale Barbosa, que será indudablemente surgido de las filas del…PRI.  

En cuanto al PRI poblano, que ya trabaja de la mano con el PAN de Augusta Díaz de Rivera Hernández y el PRD de Carlos Martínez Amador, para revivir la coalición “Va por Puebla” que hicieron en 2021 y sacar a su candidato a Casa Puebla, para su dirigente estatal, Néstor Camarillo Medina, no tiene, bueno, si hay varios prospectos: Blanca Alcalá Ruíz, Jorge Estefan Chidiac, del mismo club; Javier Casique Zárate, del clan oaxaqueño que dirige, José Murat Casab, padre del actual gobernador del vecino estado, Alejandro Murat Hinojosa, priísta que ya se apuntó para la “grande” ¿por Morena?; Enrique Doger Guerrero que por el momento tiene la mira con Nacho Mier…y don Néstor que ya se apuntó por si se requieren sus servicios. Palabras más palabras menos nos comenta: “hasta donde nos alcance”.

Son otros tiempos, el PRI, al igual que los otros partidos requiere de una militancia joven con un nuevo discurso, que contenga la verborrea que diariamente sale de las voces del poder. No hay gente nueva; desde los 80s los mismos, que ahora impulsan a las nuevas generaciones, las suyas, llevándolas a puestos de elección popular a varios Ayuntamientos, o como diputados en los Congresos locales. Nombres se le insiste ahí están. Blanca, Estefan, Casique, Camarillo, Doger y él, el más joven… quién divide sus actividades como diputado local, líder estatal y visitando entidades donde habrá elecciones este año, para gobernador, acompañando a su impulsor, Alejandro “Alito” Moreno Cárdenas…No habrá otros candidatos? Las dirigencias ya olvidaron que en el 24 habrá otra “Madre de todas las elecciones” y estarán juego Senadores, Diputados Federales y locales y Presidencias Municipales. Ante ello, trabajan para preparar a los que serán candidatos.  

Camarillo Medina comenta, en la plática que tuvimos hace unos días, que el próximo martes (mañana) habrá una reunión con jóvenes para iniciar la reconstrucción partidista, para ir por una nueva militancia más preparada y crear nuevos cuadros. Estamos a dos años del 2024, habrá tiempo para preparar aspirantes a puestos de elección popular, para integrar los Comités Seccionales, para dirigentes de los Comités Municipales. En el caso de Puebla capital, se preguntó sobre posibles candidatos a la alcaldía y únicamente surgió el nombre de José Chedraui. Será el único pretendiente de los tres partidos o…

El dirigente estatal reconoce que en el área metropolitana tiene problemas y habla que en el interior del estado están fuertes, pero lamenta la carencia de recursos, así que…Como todos los dirigentes de todos los partidos, of course, tiene plena confianza para lograr un nuevo PRI.

Estamos en los inicios de la tercera década del XXI, en Puebla vivimos bajo los gobiernos priístas 71 años como partido único. En los primeros 22 años de siglo, priístas, expriístas que en sus momentos, -el extinto Rafael Moreno Valle Rosas gobernó bajo las siglas del PAN y actualmente Barbosa lo hace bajo la bandera de Morena…Una pregunta, sin oposición fuerte, Morena conformado por disidentes del partido más añejo, seguirá gobernando con “lo más malo”, diría alguien, del viejo PRI?...

Ante la situación del tricolor en la capital y sus  alrededores, sin prospectos que tengan simpatías del electorado, el actual alcalde, panista, Eduardo Rivera Pérez, algunos dirigentes han comentado que don “Lalo” es buen pretendiente a la gubernatura…quizá, tal vez…Hasta la próxima…D.M.