•    Se detectan en etapas avanzadas hasta 70% de los cánceres
•    Esta enfermedad representa el 7to. lugar en incidencia por tumores malignos en el país

CDMX. - Ante el incremento en las tasas de defunciones por tumores malignos en el país es urgente que se tomen acciones contundentes para concientizar a la población para que acceda a un diagnóstico oportuno y pronta referencia a un tratamiento, por lo que la diputada federal del Partido del Trabajo (PT), Araceli Celestino Rosas presentó una iniciativa para decretar el 30 de octubre como Día Nacional de Concientización del Cáncer de Hígado.

La petista señaló, en los motivos de su iniciativa, que esta enfermedad originó 830 mil defunciones en 2020 a nivel mundial, siendo el tercer tipo de cáncer que causó un mayor número de fallecimientos y es uno de los diez tumores más frecuente en la población a escala nacional y mundial.

“Este tumor destaca por ser muy agresivo y representa el séptimo lugar en incidencia por tumores malignos en el país, ocupando el tercer lugar en mortalidad por tumor maligno en mujeres, y el cuarto en el caso de los hombres de acuerdo con el Centro Internacional de Investigaciones sobre el Cáncer.

“Siendo uno de los cánceres que más afecta a la población mexicana, al día de hoy contamos con una fecha conmemorativa nacional para sumar esfuerzos en dar visibilidad y mayor información sobre las características e impacto de este cáncer”, expuso Celestino Rosas.

Explicó que los principales factores de riesgo asociados al desarrollo de cáncer de hígado son las infecciones con los virus de la hepatitis B y C, el consumo de dietas altas en grasas y carbohidratos, la obesidad, y el consumo elevado de alcohol.

Todos estos problemas, señaló, desencadenan el daño hepático, que, de no controlarse, puede evolucionar a hígado graso, cirrosis, y eventualmente al cáncer.

Celestino Rosas indicó que hay un malentender respecto a los factores que desencadenan esta enfermedad pues se asocia con un consumo reiterado y excesivo de alcohol.

“Esto no es así, eso es sólo uno de los múltiples factores de riesgo, es menester comunicar a la población que esta enfermedad puede tener diversos orígenes, como la falta de aplicación de vacunas para combatir la hepatitis B o de tratamiento para curar la hepatitis C, en los hábitos alimenticios y la deficiente actividad física que provocan obesidad”, precisó la legisladora del Partido del Trabajo.

Lamentablemente, continuó, en los últimos años el hígado graso es cada vez más frecuente en la población mexicana y está fuertemente vinculado con enfermedades metabólicas como la diabetes mellitus y la obesidad, así como el consumo de dietas altas en grasa y carbohidratos, que son problemas muy importantes en México.

Actualmente se calcula, dijo, que más del 50% de la población en México padece la enfermedad de hígado graso no alcohólico (EHGNA), y que corren el riesgo, aún sin pasar por la fase de cirrosis, de desarrollar carcinoma hepatocelular (CHC), el tipo de cáncer de hígado más frecuente en adultos.

Se estima, apuntó, que cerca de 70% de los cánceres se diagnostican en etapas avanzadas de la enfermedad, lo que complica el acceso oportuno a tratamiento y por tanto disminuye en gran medida las expectativas de vida para los pacientes oncológicos, llegando a la muerte prematura por diversos tipos de cáncer.