• El 'Vasco' Aguirre habló sobre todo lo que representa para él volver a dirigir a la Selección Mexicana

CDMX. - Javier Aguirre vivirá su tercera etapa como director técnico de la Selección Nacional. Ahora, el gran objetivo del experimentado entrenador será conformar la mejor selección para la Copa del Mundo 2026, al tiempo de consolidar nuestro proyecto rumbo al 2030. ¡Y el Vasco, acepta el reto!

“La verdad estoy muy ilusionado, muy contento. Creo yo que estoy en la plenitud de mi carrera, llegó en un momento de mucha paz, mucha tranquilidad, y creo yo es una buena oportunidad para mí”, reconoció Aguirre en entrevista.

“(Lo que más me ilusiona es) Volver a mi país. Son muchos años fuera: 22 años. Volví 12 o 13 meses para el Mundial de 2010, volví 12 o 13 meses para Monterrey, pero es cierto que no me consolidé, no me quedé. Ahora sí creo que es la definitiva, ir a mi país, donde está mi familia, mis hijos, mi nieta, mis hermanos, siento que es momento, después de 22 años estar dando vueltas por ahí, de volver a mi país y hacer algo por él”, confesó el ‘Vasco’.

Aguirre habló sobre Jaime Lozano

Tras asumir como DT del representativo nacional de México, Javier Aguirre -fiel a su estilo- aclaró que en todo momento respaldó el proyecto de Jaime Lozano, al tiempo que detalló cómo se dio su regreso al combinado tricolor, destacando que la propuesta inicial de la Federación Mexicana de Futbol fue como asesor del anterior cuerpo técnico.

“Soy un convencido de que los proyectos deben de dejarlos terminar, yo apoyaba incondicionalmente a Jaime hasta el final, hasta el Mundial. Sucede que en este cargo los resultados mandan y tomaron decisiones; en ese sentido, deciden prescindir de Jaime y me llaman a mí.

“Es difícil decirle que no a la Selección Mexicana si no tiene técnico nacional. Si se decidió que no continuará el anterior, pues soy mexicano, soy entrenador, entonces es una oportunidad para mí fantástica de volver a mi país después de estar tanto tiempo fuera y de hacerlo en un Mundial, si Dios quiere. Por lo tanto, es algo muy importante.

“Apoyé incondicionalmente a Jaime, de hecho yo era, para efectos de la Federación (Mexicana de Futbol), asesor de Jaime. Hubo poca comunicación, una llamada con él, con su cuerpo técnico, un acercamiento con Ryota, pero más no. Veía los partidos, estaba presto para intentar ayudar, pero bueno, yo respeto mucho a Jaime, le aprecio y le deseo lo mejor indudablemente”, señaló el Vasco.

Después de muchos años fuera de México, y de una extensa y exitosa carrera en el extranjero, Javier Aguirre regresará a suelo mexicano para tomar la dirección técnica de la Selección Nacional, combinado al que dirigió en los mundiales del 2002 y 2010. Y como en las anteriores ocasiones, asume la responsabilidad, aunque como mucho más experiencia, según confiesa.

“Llegó en un buen momento, anímico y físico, con un buen bagaje para aportar y sumarme a este proyecto de selección para el mundial de México, ¡que va a ser en México! Me tocó jugar el Mundial en México, sé verdaderamente cómo se respira el ambiente mundialista en mi país, el último fue en 86 y estaba yo ahí, estaba adentro, y lo tengo muy presente”, apuntó.

Un Mundial en México

Estuviste en el Mundial de México 86 como jugador y ahora lo harás como técnico, ¿qué te genera esta posibilidad?, le preguntamos a Javier Aguirre.

“Me genera un montón de alegría. En 86 lo viví, vi el Azteca, vi el Volcán lleno, la gente, esos penaltis contra Alemania que nos pudieron meter a Semifinales, la gente volcada, cuando se cayó, se silenció, se amoló el sonido local y cantamos el himno ahí en el Azteca, todos, los 100 mil espectadores.

“Ahora, después de tantos años, han pasado 38 años de ese momento, las cosas han cambiado evidentemente. México está preparado -por supuesto- para un tercer Mundial y la gente está muy expectante. La caja de resonancia es mayor, las redes sociales, los medios de comunicación han crecido, la gente ha vivido, después de esto, muchos mundiales, en los que nos hemos quedado en la orilla, en el famoso quinto partido, que se logró en México en los dos mundiales, hay mucha ilusión por meterte nuevamente a este a esta al grupo de la élite”.

¿Qué fortalezas y áreas de oportunidad detectas de la Selección Nacional?

“Veo en el equipo mexicano, un equipo mentalmente fuerte. Es decir, en mi época de jugador y antes aún, siempre hay anécdotas que cuando fuiste a Europa o ibas a Brasil, ya ibas perdiendo uno-cero por el simple hecho de sentirte menos que el rival, antes de que se silbara el árbitro.

“Se han olvidado un poco los métodos, o los procesos, en afán de buscar solamente el resultado; se ha vuelto un poco resultadista esto. Una oportunidad que tenemos es esa, intentar que el método de trabajo sea transparente, sea visible y tratar de transmitir a la gente paciencia para empezar un proceso que culmine en el 26 con un resultado, que ahí sí es el resultado, no antes.

“Entiendo las exigencias de los partidos amistosos, los partidos de preparación, mejor dicho, son importantes, pero precisamente son eso: prepararnos para la fiesta grande, el 26. Ahí es donde nos ha faltado un poquito de decir, a nosotros: ‘es preparación, no se acaba la vida con este Nations o con la Copa de Oro’. Vamos a intentar transmitir ese mensaje”.

La afición mexicana te quiere y se ilusiona con tu llegada, ¿qué les dices?

“La afición está con ganas de buenas noticias. Y con cada técnico nuevo se renueva, valga la redundancia, si cabe, la ilusión. ¿Qué les puedo decir? Me conocen, todo mundo me conoce. Empecé en el América en 1975, hace casi 49 años, en diciembre hago 49 años en el futbol, me conocen, todos saben mis defectos, saben mis virtudes, saben mis problemas, saben mis sensaciones, saben todo de mí.

“La gente sabe que voy a trabajar, la gente sabe que le voy a decir la verdad, la gente sabe que soy peleón, la gente sabe que no me dejo de nadie, la gente sabe que me gusta encabronarme en los partidos, la gente sabe que voy a competir, eso le decir a la gente: que va a haber un equipo reflejo de su entrenador, un equipo aguerrido, un equipo competitivo, un equipo luchón, un equipo que no va a dar un balón por perdido, un equipo que va a dejarse el alma en el campo, eso saben que conmigo lo tienen garantizado”, apuntó Aguirre.

Y a los aficionados que se han alejado un poquito de la Selección Nacional…

“Hay que volverlos a ilusionar, hay que volverlos a reenganchar. Con base a, no palabras, hechos; es decir, es muy fácil aquí decir y tal, pero en el campo, en el campo que vean a su equipo reconocible, que estén orgullosos del equipo, que vamos a perder, claro que vamos a perder, claro que en la preparación de aquí al Mundial perderemos partidos, eso es parte de un proceso de aprendizaje.

“Que seamos objetivos con las derrotas y con las victorias, que seamos exigentes, evidentemente, porque hay material humano, pienso que a la gente decirle poco, agradecerle, que siguen yendo a ver a su equipo, que siguen sacrificando, que siguen pagando su lana con viajes largos y devolverles con esfuerzo, sacrificio y sudor, eso que ellos hacen”.

Finalmente, Javier Aguirre reconoció que cometió errores en los partidos de Octavos de Final de los Mundiales de 2002 y 2010, pero aseguró haber aprendido de ellos ahora que es un entrenador con mucha mayor experiencia.