Columna | P U L S O    P O L I T I C O

         El partido Acción Nacional, que desde su fundación, el 15 de septiembre de 1939, ha sido considerado como un partido de élite, en el que hasta para ser simple militante, se tenía que hacer un noviciado de 5 años, como en cualquier orden religiosa, ahora obligado por las circunstancias, se quiere convertir en un partido popular, quiere acercarse a las masas, pues “su esquema de afiliación, resulta complicado”. Quiere que los mejores ciudadanos se acerquen al partido conservador, para hacerlos candidatos a puestos de elección popular.

           Este intento lo va a poner en marcha los días 13 y 14 de noviembre próximo, durante su Congreso Nacional.

           Ahora resulta que niega que haya sido un partido conservador y sectario, sino un partido con valores y esos no se van a cambiar, expresaron dirigentes de ese partido.

           Lo cierto es que a través de su ya larga historia de 83 años, los panistas han cuestionado al movimiento de Independencia. Sus ancestros eran partidarios de una independencia parcial, es decir, seguir un camino libre para su desarrollo económico, pero en lo político, seguir siendo súbditos del rey español. Durante la Reforma, sus ancestros, fueron enemigos de ese movimiento y desde luego de quien lo encabezó, don Benito Juárez y en la Revolución, fueron partidarios de don Porfirio Díaz.

         Ya en la época de los gobiernos revolucionarios los antepasados de los actuales panistas, lo criticaban todo y surgieron precisamente en los finales de los años treinta para oponerse políticamente, al gobierno de Lázaro Cárdenas, que impulsó la educación popular, que nacionalizó el petróleo, que como ningún otro mandatario mexicano, aceleró la entrega de tierras a los campesinos, que puso las bases para fortalecer a las clases populares; campesinos, obreros y clase media, que fueron los pilares que le dieron sustento al partido Revolucionario Institucional, y a los que se vieron beneficiados con las políticas sociales implementadas por ese gobierno.

           HASTA EL AÑO DOS MIL, EL PAN estuvo insistiendo en que se impartiera religión en las escuelas públicas. Su candidato presidencial Vicente Fox, hizo un compromiso con los obispos mexicanos de entregarles el sistema educativo, algo que no pudo cumplir, pues a tiempo se dio cuenta de que no podría ni siquiera intentarlo, pues el pueblo de México, mostró su liberalismo en materia religiosa y no quería que en ese tema interviniera la política.

          Sin embargo, Fox pensó que si iba a misa cada ocho días a la catedral metropolitana y esa misa se televisava a todo el país, se convencería al pueblo de la necesidad de mezclar el aceite con el agua, pero no lo logró, es más, los católicos criticaban el hecho de que una pareja de divorciados asistiera al tradicional servicio religioso y que a este se le diera tan amplia difusión.

           POR OTRA PARTE, EL PAN ES MIEMBRO DE LA asociación de partidos cristianos, es miembro de la agrupación internacional de partidos cristianos y con lo que pretende, volverse un partido del “populacho” hasta puede ser expulsado de dicha agrupación.

            Pero bueno, en noviembre sabremos y eso se hace o no hace. En del Congreso Nacional se elegirá a la nueva dirigencia y ya se verá si los que resulten electos tienen la idea de cambiar las cosas.

           Va a ser difícil, pues muchos de los militantes panistas, tienen muy arraigada la idea de que el PAN es un partido católico, que lo que pretende es volver a tiempos pasados en los que el gobierno civil y el gobierno eclesiástico, eran el binomio de gobierno ideal para nuestro pueblo, como suponen que lo ha sido siempre en España, “la madre patria” a la que debemos imitar en todo, según ellos.

           En Puebla por ejemplo, el PAN nunca se ha preocupado por hacer campañas de afiliación a su partido. En primer lugar porque sus estatutos no permitían eso y en segundo lugar, porque la inmensa mayoría de sus afiliados llegaban de los muchos colegios de tipo confesional que hay en esta capital.

         El primer gobernador panista, fue militante toda su vida, del PRI, partido al que pertenecía su familia; el primer presidente municipal panista, de esta capital, era hijo de un panista michoacano radicado en Puebla, pero su hijo, no fue militante de ese partido. Su lanzamiento ocurrió cuando ya la COPARMEX , agrupación patronal nacional, ya había adquirido al PAN como empresa política subsidiaria y fue la que lo impuso. El segundo gobernador panista, Antonio Gali, nunca quiso afiliarse al PAN. Como ciudadano libre fue lanzado por Acción Nacional y también lo hizo para cubrir la gubernatura de dos años y lo hizo bastante bien, si se compara con la primera. Bueno, ya veremos si los panistas progresistas, logran cambiar la mentalidad de los viejos militantes de ese partido.

           QUE CREE: EL PARTIDO MORENA YA ELIGIO COMITÉ estatal, aunque hubo algunas protestas por no haber condiciones para una elección verdaderamente democrática.

           Se hizo válida la elección de los 150 consejeros, pese a los problemas que en algunas partes hubo y así las cosas se procedió a elegir a los dirigentes del partido en la entidad: Andrés Villegas Mendoza, preside el Consejo estatal y Olga Lucía Romero García y Agustín Guerrero Castillo, quedaron al frente del comité ejecutivo estatal de Morena.

           AYER FUE RECORDADO EL FALLECIMIENTO DE DOS grandes mujeres que destacaron en la historia de nuestro país: Carmen Serdán Alatriste, poblana, hermana de Aquiles y Máximo Serdán, muertos en el primer enfrentamiento con la policía porfiriana en su casa particular, hoy museo regional de la Revolución y Leona Vicario, heroína de la Independencia.

           El acto fue en la Casa de los Serdán y las oradoras fueron: la Secretaria de Economía, Olivia Salomón y la subsecretaria de pevención del delito y de Derechos Humanos de la secretaría de Gobernación. Estuvieron en el acto: el titular del Poder Ejecutivo y los presidentes del poder Legislativo y Judicial, así como el comandante de la VI Región Militar.