Columna | P U L S O    P O L I T I C O
 
            El Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación, revocó el llamado del Consejo Nacional de Morena, para realizar el domingo 26 del actual, el Congreso Nacional de ese partido, para hacer cambio de estatutos y de dirigencia nacional, porque para que ese llamado tuviera validez, debió haber 141 asistentes a la reunión del Consejo Nacional y solo hubo 140, es decir, solo estuvo el 50 por ciento de los integrantes del Consejo Nacional y faltó uno para cumplir con el requisito del quórum legal,  la presencia del 50 por ciento más uno.

           Sin embargo, Marta Luján, la presidenta del Consejo Nacional, afirma que estuvieron presentes 142 consejeros, pero además, afirmó que el documento fue avalado por 18 consejos estatales, lo que cubre uno de los requisitos estatutarios para realizarse. Acusó al grupo de Yeidckol Polevnski, de utilizar tácticas legaloides para tratar de frenar el congreso. No nos preocupa nada, señaló Luján, la resolución del TEPJF, porque tenemos dos elementos totalmente previstos en el estatuto, y es que está convocando más de la tercera parte de los consejeros estatales y eso no está en duda.

             El Consejo Nacional Extraordinario, que es el máximo organismo de participación, puede ser convocado cuando lo solicite por escrito la mayoría de los integrantes del Consejo Nacional, el Comité Ejecutivo Nacional o la tercera parte de los consejos estatales”, señaló.

              Afirma que 18 consejos estatales, respaldaron la convocatoria en las reuniones que tuvieron los últimos tres fines de semana.

              Javier Hidalgo, informó que la mayoría de los diputados de Morena, respalda la realización del Congreso Nacional Extraordinario para convocar a la elección de una nueva dirigencia.

              El diputado Hidalgo, acompañado de Berta Luján y de un grupo de diputados, dijo que con el respaldo de 18 consejos estatales, que ya han oficializado su postura, el congreso extraordinario se llevará a cabo.

              Los asistentes al Congreso de Morena, deberán estar el domingo en la Sala de Armas de la Ciudad Deportiva de la ciudad de México.

              Como ve, la lucha interna por el poder en Morena, que es el nuevo partido mayoritario en México es cerrada e inconsciente. Todo mundo critica que la cúpula morenista, no quiera darse cuenta del gran daño que sus ambiciones personales o de grupo, están ocasionando al gobierno de López Obrador empeñado en llevar adelante la llamada Cuarta Transformación.

             El Presidente sólo, tiene que estar enfrentando los golpes que le mandan a su gobierno, los grupos que han perdido sus privilegios. Quienes deberían estar defendiendo las posturas presidenciales, con argumentos sólidos, bien estructurados, son sus partidarios, pero para eso se requiere que cuenten con un partido bien estructurado, bien organizado, bien disciplinado y lo que hay, es no es nada de eso, sino miles de simpatizantes que se concretan a ver como las señoras Polevnski y Luján, se lanzan golpes abiertos, sin razones válidas, haciendo lo contrario de lo que deben hacer.

             No hay posibilidad de arreglo, de llegar a acuerdos, pues los grupos que se disputan el poder en el nuevo partido,  están completamente cerrados al diálogo y a la negociación.

              Antier en Puebla, el líder del Senado Ricardo Monrreal Avila, se pronunció a favor de que por encuestas, sea designada la nueva dirigencia nacional de su partido y parece que ese es el meollo del asunto. La señora Polenvski, quiere votación abierta. Por algo será.

              Marko Cortés, el dirigente nacional del PAN decidió que la diputada Mónica Rodríguez, siga en la coordinación de la diputación panista en el Congreso, pues la había destituido ya doña Genoveva Huerta, la dirigente estatal.

          También ofreció enviar una delegación del comité nacional, para que mediante el diálogo se destrabe el conflicto interno que confrontan las mujeres panistas, es decir, Genoveva Huerta perdió la partida, porque el delegado asumirá de hecho la dirección del PAN en Puebla.

           La negociación para llegar a estos acuerdos, no fue fácil. Se reunieron los cuatro diputados panistas del Congreso local y otros personajes del debilitado panismo local, y los acuerdos se tomaron después de seis horas de discusiones.

             Por lo que se ve, en los últimos meses las mujeres que ya militan en partidos políticos, están cobrando fuerza. Por lo menos aquí en Puebla, tienen en vilo a Morena y al PAN. No se avizora ninguna rebelión femenina en el PRI.

Publicado en COLUMNAS

Consola de depuración de Joomla!

Sesión

Información del perfil

Uso de la memoria

Consultas de la base de datos