Columna | En pocas palabras

Hablemos de beisbol: El pasado domingo, México,  vivió con sumo interés, la séptima entrada, el inning de la suerte o la fatídica, según sea el caso, del partido que concluirá en junio del 2024 y cuya siguiente entrada será el año próximo en las plazas de Coahuila y el EdoMex. Los lanzadores de la novena de la oposición no soportaron la andanada de la batería del equipo de casa, que finalmente anotó 4 carreras contra dos. No hay más, salvo que acudan a la mesa para protestar. De entrada habrá acusaciones, declaraciones triunfalistas de todos lados, como siempre, pero los números allí están en el box score.   

El resultado de las elecciones en los estados de Quintana Roo, Oaxaca, Hidalgo, Aguascalientes, Durango y Tamaulipas, no causó ninguna sorpresa. Lo que sí sorprendió fue el alto porcentaje de abstencionismo que rebasó el 60% en Oaxaca y a sólo un punto de ese 60 en Quintana Roo, los candidatos de Morena y sus adláteres dieron una paliza a los abanderados del PRI, PAN, PRD, que no fueron en alianza,  lo mismo ocurrió en Hidalgo con alianza, y al de Movimiento Ciudadano.  En el caso de Aguascalientes y Durango la felpa fue al revés con triunfo fácil de los allí si aliancistas. Tamaulipas fue el más disputado pero quedó en manos del partido oficial.

Por qué el abstencionismo. Por lo menos desde hace tres décadas, el Instituto Federal Electoral-IFE-, hoy Instituto Nacional Electoral -INE-, en épocas de elecciones realizan intensas campañas para promover el voto pero lamentablemente los ciudadanos no responden| y quienes ganan los puestos de elección popular llegan a la Presidencia, gubernaturas, Presidencias Municipales, a las Cámaras de Senadores y de Diputados Federales y locales, lo hacen con porcentajes de poco más arriba del 30%. Es decir no le interesa a esa sociedad que personajes la van a gobernar, ni de qué partido político son.

Es tanto el desinterés ciudadano que en este sexenio los triunfos de Morena, han sido con candidatos que dejaron el PRI. Así vemos que el priísmo está vigente. Ahora desde Morena la disidencia de ese partido a migrado para seguir gobernando en la mayor parte del país, con la visión de otro ex priísta con sus variantes, dicen democráticos.

Vienen tiempos de discusiones, mientras oficialmente se entregan las constancias de mayoría, declaraciones, análisis, clamor de cambios de dirigencias, y preparativos para 2024, nombres, nombres, corcholatazos y corcholatazos, pero sin tomaren cuenta a los electores. Algunos comentarán lo bueno y lo malo del proceso electoral 2021-2022, en los restaurantes, centros de trabajo y abriendo quinielas…  

Con los días, llega nuevamente la indiferencia y se retoma la rutina diaria. No quieren saber nada de los políticos. Los políticos no se acuerdan de los ciudadanos a los cuales en campaña visitó para solicitar su voto. Y los líderes de los partidos políticos empiezan operaciones en busca de una nueva oportunidad en la próxima elección, para los suyos.

Las declaraciones de las dirigencias partidistas, de organizaciones sociales, van en el sentido  de permanentes protestas por las acciones de los gobiernos en turno, pero nunca se llega a estudiar a fondo las principales causas de la indiferencia de la mayor parte de la sociedad para participar en una elección.  

En poco menos de 2 años habrá la elección presidencial, de ningún partido ha habido comentario de preparar un programa para competir. Sólo de cambios en sus dirigencias, particularmente en estos momentos y nombres de hombres y mujeres ya conocidos para representarlos en “la grande”.

Actualmente hay una permanente denuncia relacionada con el aumento de mexicanos en pobreza, pero que se hace para combatirla y hacer que esos millones de pobres regresen, por lo menos, al estado en que se encontraban…

Hablan mucho de que el PRI se va. Veo que hay priísmo para rato bueno o malo, según lo califiquen, pero es el gen del PRI.  

En el futbol, hace años, se decía que los jugadores llevaban “la camiseta pegada al pecho”; hoy, por lo menos dos oncenas de un mismo propietario, juegan en la misma liga. En la actualidad, en nuestra política, el partido más longevo PRI, nutre a Morena y sus partiditos, también salidos del organismo conjuntado por Plutarco Elías Calles. Como dijera alguien, defiendan al pueblo…tan…tan.  

El INE, que hizo un excelente trabajo al igual que los miles de ciudadanos que estuvieron en las casillas en las 6 entidades, y que merecen el reconocimiento de la sociedad…Hasta la próxima…D.M.