Columna | P U L S O    P O L I T I C O

               Le decíamos ayer en este espacio que un priísta amigo nuestro nos decía que los triunfos de su partido en Hidalgo y en Coahuila, no deben ser vistos como el regreso del PRI gobierno, pues esos dos estados tienen características especiales que hicieron posible el triunfo. “Está bien que haya alegría entre los militantes, después de la estrepitosa derrota del 2018 esto nos cae muy bien, pero no resuelve los problemas que nos llevaron a la espantosa derrota del 2018”, señala.

              “Los panistas suelen creer que un pequeño triunfo en algún municipio importante significa que la gente está con ellos y ya se demostró que no. Ni siquiera logran penetrar en el municipio que ganaron como ha ocurrido en Puebla durante el morenovallismo. Puebla no es bastión panista ni nada que se le parezca. Ganó en el 2010, porque un priísta moñoso y corrupto, formó una corriente ajena al PAN pero dentro del PAN y lo hizo triunfar. Y una prueba de esto es que todos los panistas importantes que había aquí, entre ellos personajes como Ana Teresa Aranda, que fue pare del gabinete de Vicente Fox o Humberto Aguilar Coronado, que fue senador de la república, salieron corriendo para escaparse del morenovallismo. Pero como ellos hubo muchos más y solo uno, un panista, formó parte del gabinete del gobierno surgido de ese partido que se alquiló para que priístas no muy recomendables, asumieran el poder”.

               Bueno, pues ahora les vamos a comentar lo que está ocurriendo en Michoacán, entidad que a diferencia de Puebla, siempre ha tenido una importante zona de su territorio identificada con Acción Nacional y la derecha y otra gran parte de los michoacanos, se identifican con el liberalismo.

              De allá han sido destacados derechistas tanto en la época de la Independencia, como en los tiempos de la Reforma y de la Revolución y grandes luchadores por las libertades y derechos de los ciudadanos.

               En una encuesta que publica el diario capitalino “El Universal” que no es precisamente partidario del actual gobierno federal, señala que para el cambio de gobernador del Estado, el 21.3 por ciento dijo que votará por “Morena”; el 7.2 por ciento lo hará por el PRI; el 6.8 por ciento, lo haría por el PAN y solo el 4.5 lo haría por el PRD, partido que actualmente gobierna.

              Y lo que comentamos de Michoacán, puede ocurrir en la mayor parte de los Estados del país.

               La votación obtenida por el partido en el poder en el 2018, fue por el hartazgo de la gente que ya estaba hasta la coronilla de la corrupción y de la ineficiencia de los gobiernos del PRI y del PAN cooptados por el neoliberalismo, sistema económico impuesto por Estados Unidos e Inglaterra a gran parte del mundo occidental, que ocasionó el acaparamiento de la riqueza en unas pocas manos y el aumento desmesurado de la pobreza.

              Chile y México, fueron ejemplo de buena aplicación de las políticas neoliberales y vean como está Chile. Tiene un largo año de serios conflictos sociales que van creciendo y que se iniciaron porque en la capital de ese país, se aumentó el precio del metro. Es fue la gota que derramó el vaso y la medida solo afectaba a la capital del país y el estallido fue en todo el territorio. Los ciudadanos ya estaban hasta la madre y ahora habrá un referéndum para determinar si desechan la constitución de Pinochet o no. Adivine quien va a ganar, el no o el sí.

              Bueno pues en México el descontento de la gente estalló en las urnas en las elecciones del 2018 y no hubo posibilidad de hacer fraude, como el del 2006, porque la cantidad de votos emitidos a favor de López Obrador, 30 millones, fue superior a la de cualquier otro candidato a la presidencia en la historia del país.

              Lo que el PRI debe hacer, según mi amigo priísta, es hacer un trabajo intrenso de recomposición interna. Unificar a todos los priístas, reorganizar al partido, preparar a sus cuadros tanto en acción política como en historia de México e infundirles valores para ejercer el poder con humildad y responsabilidad, pero sobre todo, con honradez.

              EL PARTIDO MOVIMIENTO CIUDADANO, QUE en Puebla dirige quien fuera dirigente estatal del PRI y ex diputado local de ese partido, Fernando Morales, no se aliará con nadie para las próximas elecciones del 2021. Dará la batalla con sus propios cuadros y procurará que estos sean personas jóvenes de ambos sexos, con trabajo político y con sensibilidad social.

             Dice el dirigente de Movimiento Ciudadano en Puebla, que darán una gran sorpresa en las elecciones que vienen. La fundación México con Valores a cuyo frente está Gauce Palomares, trabajará junto con el partido mencionado, haciendo campaña para que la población reconozca que sin valores la política no funciona. Ellos conformarán una red digital para penetrar en el mayor número de casas a fin de formar una corriente fuerte que paricipe en la regeneración del país.

Publicado en COLUMNAS

Consola de depuración de Joomla!

Sesión

Información del perfil

Uso de la memoria

Consultas de la base de datos