Columna | DIPUTADO 501

El Grito de independencia que diera Miguel Hidalgo el 15 de septiembre de 1810 fue la primera Declaración de independencia de carácter oral, por la tradición y costumbre resulta una convocatoria al pueblo de México a mantener viva su independencia, un contrato social que es ratificado cada año en la verbena popular que reúne y une a todos los mexicanos, incluso a los del exterior.

La Declaración de independencia como documento escrito y promulgado tuvo dos momentos claves; el primero durante la instalación del Congreso de Chilpancingo promovido por Morelos, el 14 de septiembre de 1813, antecedida por la aprobación de los Sentimientos de la Nación, en cuanto a Iturbide el año de su proclamación es de 1822. La segunda Declaración adquirió una mayor aceptación a partir de su nominación de Consumación de la independencia, a la que se le intento dar un valor similar al Grito y propiciar la similitud entre Iturbide e Hidalgo. No fue acogida la similitud por el antagonismo de ambas posiciones

Durante largo tiempo el nacionalismo mexicano se sustento en el repudio a los peninsulares ibéricos, acompañado de xenofobia a lo español, a pesar de la ascendrada herencia cultural recibida del mestizaje formada en la población, sin embargo estas manifestaciones se han ido borrando incluso en relación con los Estados Unidos, cuyos gobernantes expansionistas nos despojaron de la mitad del territorio, en la actualidad la proximidad e intercambio que otorga la  migración ha extendido una red de poblamiento fuera de nuestras fronteras que significa de alrededor de 16 millones de mexicoamericanos. La Nación se ha desbordado.

 Hoy en el transcurso del Mes de la Patria ocurren hechos trascendentes que mañana serán historia.  El Presidente AMLO  ha invitado a diez personalidades de diversas nacionalidades quienes serán testigos presenciales de decisiones importantes que dará a conocer el ciudadano presidente de México, entre ellas la anexión de la Guardia Nacional al Ejército mexicano, también se rumora que el marco conmemorativo servirá de atril del nacionalismo mexicano para responder a las demandas de los EEUU y Canadá en reclamo a las violaciones a los acuerdos del TMEC Tratado de libre comercio de América del Norte.

En otro contexto, la Corte Interamericana de San José de Costa Rica, se dispone a emitir un extrañamiento al Gobierno por su incumplimiento de proteger y garantizar los Derechos Humanos e incumplimiento del artículo 1º de la Constitución donde se acogen estos derechos que son violentados al propiciar la anexión de un órgano de seguridad pública al servicio de los ciudadanos a incorporarlo en el Ejército mexicano.

Estas y otras demandas se presentarán en un gobierno ha quebrantado el derecho internacional que voluntariamente acepto cumplir. En virtud de que México es el país de menor desarrollo de la cadena supranacional de América del Norte es de prever que las sanciones y presiones derivadas de los convenios internacionales firmados voluntariamente dañaran severamente los recursos disponibles para otras demandas de orden social o de apoyo al desarrollo nacional.

El fulgor de nuestra independencia mantiene su resplandor aunque los compromisos de la sociedad supranacional agobia su cumplimiento.

Viva México!!!