Columna | P U L S O    P O L I T I C O

              Eduardo Rivera Santamaría, empresario poblano y ex locutor en una estación de radio local, anunció ante representantes de la prensa local, que buscará ser candidato a la presidencia municipal. Todavía no sabe por cual partido, pues está dialogando con dirigentes de varios de ellos, para llegar a un acuerdo.

              Dijo haber sido perseguido político durante el gobierno del panista Rafael Moreno Valle Rosas, cuando fue acusado por seis delitos, todo por haber defendido los derechos humanos de varias personas. Gracias a un equipo de abogados que asumió su defensa y al apoyo de varios grupos ciudadanos, dijo, fue exonerado de todos, pues nada se le pudo comprobar.

             Considera que uno de los problemas más graves del municipio capital del Estado, es el de la inseguridad, pero este problema no es nuevo. Ya tiene varios años, lo que pasa, afirmó, es que no se ha querido enfrentar el problema en la única forma en que debe ser enfrentado: promoviendo el desarrollo, el empleo y luchando contra la desigualdad social. Educación y salud, deben ser impulsados en todos los rumbos del municipio, lo mismo que vivienda digna. El problema es social y no de policía exclusivamente, aunque los cuerpos de seguridad deben ser substancialmente mejorados, sobre todo eliminando la corrupción que ha sido característica de nuestros cuerpos policíacos.

              El problema para el señor Eduardo Rivera, es que es homónimo del posible candidato del PAN Eduardo Rivera Pérez, lo que podría prestarse a sospechas, pues los electores poco informados pueden tener confusiones a la hora de votar. Eso en el caso de que las disminuidas huestes panistas, de animen a lanzar a “Lalo”. Cuando se supo de las intenciones del señor Pérez Santamaría hubo quienes pensaron que es algún maléfico plan de los opositores a “Lalo” el panista o al propio PAN, quienes idearon tal cosa para crear confusión.

             CASOS COMO EL QUE COMENTAMOS, son una prueba fehaciente de lo que hemos venido diciendo desde hace meses: los partidos políticos en Puebla y en todo el país, están tan mal, que como carecen de cuadros formados en las filas de las agrupaciones o partidos políticos, sus candidaturas a los puestos de elección popular, se ofrecen al mejor postor o cualquier persona, sin experiencia, sin haber ocupado un cargo dentro de las estructuras de gobierno, sin sensibilidad política y sin sensibilidad social, se lanzan como el “Borras” para ver si pega.

             La política en nuestro país se ha venido degradando a través de la etapa neoliberal que encabezó Carlos Salinas de Gortari. Es cuando empezaron a surgir partidos políticos propiedad de algunas personas influyentes: el PANAL, tuvo una dueña que fue doña Elba Esther Gordillo: el PT es propiedad de un señor Anaya que ha logrado sostenerlo contra viento y marea, tal vez porque éste es el único que sostiene una postura ideológica de izquierda que no ha cambiado; el Verde Ecologista, es propiedad de la familia del niño Verde y se alquila al mejor postor, para no perder su registro; el Movimiento Ciudadano es propiedad del ex gobernador veracruzano Dante Delgado Ronauro; el PRD, es propiedad de los llamado “Chuchos” don Jesús Ortega y don Jesús Zambrano y los que no tienen dueño, el PRI, el PAN, están tan divididos, desgastados y desorganizados, que ya ni ellos saben cual es el grupo que los controla, porque esos dos partidos, históricos y tradicionales, cayeron en grupos de poder, que hacen lo que quieren y los militantes de a pié no tienen más remedio que callar y obedecer o mandar a sus dirigentes por un tubo y resignarse a ser ciudadanos independientes.

            El caso de “Morena” el ahora partido en el poder, se conformó con descontentos de todos los demás partidos y eso le ha impedido ser un auténtico partido político. Con problemas internos graves que están surgiendo por todas partes, lo que no ayuda al presidente empeñado en su proyecto de la 4-T, que muchos morenistas no parecen comprender. A este partido le urge conformarse con una buena estructura, una buena organización para poder ser opción para elegir ayuntamientos y diputaciones, pues es en eso en donde muchos han fallado. Además, le urge lograr la unidad de su militancia.

            ENERO FUE UN MES SUMAMENTE PROBLEMÁTICO para Puebla: hubo 14 mil contagios de covid-19, entre ellos mil 466 menores de edad de los que 28 fallecieron, Muchas personas han fallecido y no precisamente de covid, aunque es posible que por el estrés a que ha sido sometida la población por el confinamiento, la pérdida de empleos, la quiebra de negocios, etc. Entre ellos ha habido muchos que ya sufrían enfermedades crónicas y por los problemas surgidos en el seno de sus familias, por la angustia de adquirir el contagio, cayeron en depresiones que agravaron sus males y finalmente perdieron la vida. Esto que pasa en México, está pasando en todo el mundo.