Lunes, 09 Enero 2017 20:09

Dinero tirado a la basura

Columna | P u l s o   P o l i t i c o

   Al explicar las razones que tuvo para autorizar el aumento al precio de las gasolinas, el presidente Peña Nieto, dijo que seguir subsidiando al combustible para no pagar el costo político que el aumento implicaba, sería lo mismo que se hizo en el sexenio pasado, el de Calderón, de prácticamente tirar a la basura un millón de millones de pesos, sosteniendo un gasto que no reditúa ningún beneficio.

   Por eso mismo, el gobierno debería analizar la conveniencia o inconveniencia, de seguir subsidiando a los partidos políticos, que no reditúan ningún beneficio a la población, por el contrario, son causa de la desconfianza de los ciudadanos hacia las instituciones públicas.

   Los partidos, según la Constitución, son organismos de interés público, a los que se financia con dinero proveniente de los impuestos, sin que la población se vea beneficiada, sin que nuestro sistema llegue a ser realmente democrático.

   Ese gasto multimillonario, da lugar a otro gasto igualmente oneroso, con el que se sostiene una institución de lujo, como es el Instituto Nacional Electoral, formada para garantizar el respeto al voto popular, pero que en realidad, no garantiza nada, pues la percepción generalizada es que el ahora denostado Andrés Manuel López Obrador, ganó las elecciones para presidente de la república en dos ocasiones y en ninguna le fue reconocido el triunfo. Y en el 2006, hubo necesidad de que el PAN recurriera a la ahora defenestrada maestra Elba Esther Gordillo, para que Calderón pudiera triunfar con menos del uno por ciento porcentual, la votación más baja por la que un candidato presidencial ha llegado al poder en México.

    Y luego, la sobrerrepresentación en la Cámara de Diputados y en la de Senadores que solo beneficia a la llamada clase política, porque unos y otros aprueban lo mismo que aprobarían 200 o 300 diputados y 64 senadores.

    Cuando los ciudadanos se enteran de las cantidades que los funcionarios del INE y los “representantes populares” reciben de aguinaldo y de bono, se enojan, se molestan y de ahí sus reacciones violentas como las que hemos visto en los últimos días.

    El pueblo quiere resultados y ni los partidos, ni el INE, ni las cámaras, le dan esos resultados que espera y eso se debe a una sencilla razón: los partidos al perder sus respectivas ideologías, hacen que sus militantes no luchen por ideales, sino por intereses; eso provoca que tantos políticos ocupen puestos para los que no están preparados. Su objetivo es esencialmente económico y de poder. Todo eso hace que el INE no funcione.

    Vamos a poner un ejemplo reciente: en las pasadas elecciones presidenciales en Puebla ganó Andrés Manuel López Obrador, candidato del PRD. Pero pese a haber ganado la elección presidencial, las senadurías de mayoría no las ganó el PRD, sino el PRI y pese a que el PRD ganó la elección de presidente de la república, no ganó ninguna diputación de mayoría.

    ¿Nadie se dio cuenta de eso? ¿A nadie le llamó la atención? No, ni los partidos políticos, ni menos a las autoridades electorales. Seguramente se llegó a la conclusión de que los ciudadanos poblanos son tan evolucionados políticamente hablando, que votaron por un  candidato presidencial de izquierda y por senadoras de centro y diputados entre centristas y derechistas, para compensar y por ningún candidato de izquierda, para que el candidato presidencial no vaya a sentirse rey.

   ¿Cuánto dinero se ahorraría la nación subsidiando solo a los tres o cuatro partidos que debe subsidiar, redujera los elevados sueldos de los consejeros del INE y redujera también el número de legisladores? Sería un ahorro considerable y a la mejor los ciudadanos volverían a creer en las instituciones.

    El arzobispo de la Iglesia Católica Ortodoxa de Antioquía en México y Centro América, Antonio Chedraui, es famoso por la gran fiesta que ofrece cada año para celebrar su onomástico. A esa fiesta concurren políticos de primer nivel como gobernadores, secretarios de estado, senadores, diputados, etc., y empresarios también de primer nivel, así como jerarcas de la Iglesia Católica

    Llegan en aviones privados o helicópteros y gozan de la presencia de conjuntos artísticos de primera línea.

   La noticia es que este año, no habrá fiesta. El señor Arzobispo, que tiene muchos amigos en Puebla, principalmente de la colonia Libanesa, está enfermo. Sus amigos se están concretando a enviarle mensajes deseándole una pronta recuperación.

    Ayer tomó posesión como presidente de la Asociación Nacional Revolucionaria, general Leandro Valle en Puebla, el licenciado Arturo Villaverde.

    El acto se realizó en las oficinas del PRI municipal contando con la asistencia del general Arturo Hernández, en representación del comité nacional, quien fue el que tomó la protesta y en representación del dirigente estatal del PRI, Jorge Charbel Chidiac, estuvo el licenciado Marco Antonio Ponce de León.

    Con esto resurge en Puebla una Asociación que ha tenido importancia dentro del priismo y que está conformada por militares en retiro y personas de la sociedad civil.

    El nuevo presidente en Puebla de la Asociación, tiene el proyecto de impulsar proyectos productivos, de hecho ya lo está haciendo, principalmente en comunidades rurales. La Leandro Valle, es una agrupación preocupada principalmente por el mejoramiento educativo y económico de las familias de escasos recursos.

Publicado en COLUMNAS

Consola de depuración de Joomla!

Sesión

Información del perfil

Uso de la memoria

Consultas de la base de datos