Después de los trágicos acontecimientos del pasado veinticuatro de diciembre, en que perdieran la vida la Gobernadora en funciones de Puebla Erika Alonso Hidalgo , junto con su esposo el ex gobernador y actual senador de la república Rafael Moreno Valle Rosas y su secretario particular con  los dos pilotos que estaban a cargo de la conducción del helicóptero, hechos que continúan bajo investigación por parte del Gobierno de México apoyado por expertos de Canadá y Estados Unidos, para determinar las causas del mismo y establecer si efectivamente se trató de una falla mecánica o humana o si bien existió una causa externa que lo propiciara. Puebla se debate en un conjunto de discusiones y análisis de la clase política, de las autoridades como el Congreso del estado y los líderes de los partidos políticos para resolver la designación del Gobernador o Gobernadora Interina y si finalmente las fuerzas que representan se pondrán de acuerdo para preparar un nuevo proceso electoral, que  los enfrente de nueva cuenta en la lucha por el poder en los próximos seis años de gobierno. Bajo este orden de ideas, tuve la oportunidad de platicar con un distinguido militante del PAN desde hace más de treinta años y quien me solicitó no proporcionara su nombre a fin de evitar tener más problemas de los que ha vivido, a nivel del Partido, desde que decidió oponerse a la candidatura en el año 2010 del ex gobernador Rafael Moreno Valle, de quién siempre tuvo muchos cuestionamientos por su pasado priista y porque a su llegada, bajo los acuerdos tomados por la dirigencia nacional y la profesora Elba Esther Gordillo, les fue impuesto como candidato a la gubernatura, a pesar de no haber tenido vida activa dentro del partido y mucho menos estar identificado con su ideología y principios, tal como lo señaló en varias oportunidades; sin embargo el “candidato “ fugado de las filas del PRI, supo cómo irse introduciendo en el ánimo de los dirigentes y hacerles creer, que de obtener el triunfo los primeros favorecidos serían los militantes del partido y que ya como gobierno de alternancia en Puebla, lograrían terminar con los viejos vicios del priismo, como el corporativismo, la compra del voto, el uso de los recursos públicos para las campañas políticas y la represión en contra de los opositores al sistema, pero algo que nunca imaginó fue que al obtener el triunfo Moreno Valle, quién salió perdiendo fue el partido, ya que se apoderó de su estructura y buscó a toda costa marginar a los cuadros tradicionales e imponer a sus incondicionales en los cargos de la dirigencia, negándoles incluso la oportunidad de trabajar en el nuevo Gobierno, sino por el contrario se rodeó de ex priistas y de funcionarios traídos de otros estados del país para otorgarles los mejores puestos en la administración estatal y con ello lograr imponer a sus candidatos en las elecciones intermedias a las diputaciones locales, federales y alcaldías, sin tomar en cuenta para ello a la vieja militancia panista y los cuadros que por décadas lucharon en contra de los gobiernos del PRI, es decir, el invitado a la casa del partido termino quedándose con la misma y expulsando a sus antiguos inquilinos, mediante una afiliación masiva de militantes a fin de tener el control absoluto del Partido y candidaturas siguientes, como lo fue primero la de Antonio Gali Fayad, quién hasta ahora siempre ha negado su militancia en el PAN y después la de Martha Erika Alonso para la gubernatura del Estado. Pese a lo anterior Moreno Valle, no pudo obtener la candidatura a la presidencia de la República que le fue ganada por el otrora dirigente Nacional Ricardo Anaya quién tenía el control de la mayoría del PAN a nivel nacional, lo que no tuvo Moreno Valle y terminó por conformarse con una candidatura plurinominal al Senado. Por todo ello, su siguiente objetivo era lograr el control del Partido a nivel nacional, ya que tenía muy claro, que sólo de esa forma le garantizaba alcanzar la candidatura a la Presidencia en el 2024, objetivo que ya no pudo lograr por su inesperada muerte. Para los panistas de Puebla, esta es la oportunidad que tenemos me declaró ya que es momento de recuperar a nuestro Partido, nombrar una nueva dirigencia, depurar el padrón de militantes y evitar que los grupos del Morenovallismo que nada tienen que ver con la ideología y principios del partido, continúen usufructuándolo en su beneficio personal y de su grupo, ya que a todo mundo han hecho creer que si se ganó la gubernatura fue por ellos y los partidos aliados, olvidando que Acción nacional tiene una historia en el Estado que le ha permitido crecer en la preferencia electoral, aún antes del Morenovallismo que está destinado a desaparecer porque representa las ideas e intereses más alejados de nuestra doctrina de apoyo a los ciudadanos, daremos la batalla desde ahora y considero que en la elección extraordinaria nuestro partido propondrá a un candidato de nuestras filas identificado con la auténtica militancia y de ahí que decimos convencidos “ PANISMO SI, MORENOVALLISMO NO”