El delegado del comité nacional del PRI, senador José Olvera, afirma que el priismo en Puebla, se enfrenta a una situación difícil, “pero hay la voluntad de recobrar la entidad y creemos que con unidad, una buena estrategia, un buen proyecto y un buen candidato, podemos lograrlo y sobre eso estamos trabajando”     .

       Fue una reunión de columnistas de los diferentes medios de comunicación con el representante del PRI nacional, totalmente informal, sin que el funcionario priista eludiera ninguna pregunta, ningún cuestionamiento. Solo estuvo acompañado del titular de prensa del comité estatal, Ismael Ríos.

       Olvera fue ya diputado local en su estado natal, Zacatecas; diputado federal, presidente municipal de la capital de su estado, candidato a la gubernatura en 1998, contra Ricardo Monreal del PRD y perdió; dos veces ha presidido el PRI en su entidad y ahora es senador de la república.

       La reconstrucción de su partido en Zacatecas, en gran parte lograda por él, le permitió recobrar el poder estatal que durante doce años estuvo en manos del partido del sol azteca, con Monreal y después con Amalia García.

        Reconoció que el PRI en Puebla está dividido, pero afirmó que en muchas entidades donde el PRI perdió una elección estatal, se produjo el fenómeno de la división al ya no tener en el poder, a un árbitro, un gobernador priista, que mantuviera la unidad y el diálogo con las bases.

      Surgieron las ambiciones, los oportunismos y al no haber un control, por falta de una autoridad con fuerza para mantenerlo, vino el debilitamiento del partido, el descontrol de la militancia y las dificultades para recobrar el poder.

      Hizo críticas al sistema económico neoliberal, que concentra la riqueza en unos pocos e incrementa la pobreza en grandes masas, por lo que ese sistema requiere ser analizado en México para hacerle los ajustes y los cambios que sean necesarios.

       No es posible volver al pasado, estamos ya en plena globalización y no podemos dar marcha atrás, pero sí realizar las correcciones que sean pertinentes, para que toda la población se vea beneficiada con el crecimiento económico nacional. Hay necesidad de impulsar al campo, de recobrar nuestra independencia alimentaria y de trabajar para que se creen empleos en el medio rural, en las actividades agropecuarias y no solo en las grandes ciudades.

      Dijo que el presidente Enrique Peña Nieto, ha duplicado el número de empleos creados por los dos gobiernos panistas que le antecedieron; logró las reformas estructurales con la aprobación de todas las corrientes políticas y eso ha dado un gran impulso a la economía; se ha avanzado en el mejoramiento del sistema educativo y en el sistema de salud, se han creado hospitales modernos para servicio de la población que más lo necesita y también se han saneado las finanzas del Seguro Social, que estaban en números rojos y ahora están en números negros.

       Tal vez, señaló, ha fallado la política de comunicación y por eso se ha puesto mucho énfasis en lo negativo y no en lo positivo logrado por este gobierno. El tema de la inseguridad, ha sido el que se ha manejado en los medios nacionales y extranjeros con mayor insistencia, pero no se dice que mientras la delincuencia siga recibiendo apoyo económico y armamento propio para una guerra, de los Estados Unidos, por mucho que México se esfuerce, no podrá acabar con ese flagelo.

        “Se olvida que la reforma en las comunicaciones, que eliminaron el costo de las llamadas telefónicas a larga distancia, perjudicaron a las empresas que prestan ese servicio y la reforma que eliminó el monopolio de las televisoras, también dañó los intereses de las principales empresas de la materia, en este país”.

        Hubo preguntas referentes a Carlos Salinas de Gortari, por una parte y a Rafael Moreno Valle, por otra y el entrevistado no las eludió.

        Dijo que Salinas de Gortari tuvo que ceder ante las presiones de Estados Unidos y la Unión Europea, para poder firmar los tratados de libre comercio con esas naciones.

        “Para poder celebrar convenios comerciales y para lograr que llegaran a México los grandes inversionistas, las economías más importantes del mundo occidental, exigieron que México trabajara con mayor empeño en lograr el respeto a los derechos humanos y que hubiera apertura democrática, pues consideraban a nuestro país como un país de partido único, autoritario y donde el respeto a los derechos humanos dejaba mucho que desear”.

         “También pusieron condiciones económicas, como la apertura en electricidad y petróleo y que dejara entrar al sector privado nacional e internacional, en negocios como la exploración, explotación y venta de combustibles; la electricidad, los ferrocarriles, etc.

        México tuvo que ceder a todo, por la sencilla razón de que en ese momento, era un país quebrado económicamente, que no tenía dinero para pagar ni siquiera los intereses de la deuda externa.

        Las condiciones impuestas a nuestro país, si se cumplían, darían lugar a que se renegociara la deuda para pagarla en 24 años y además recibir un préstamo multimillonario en dólares, para impulsar el desarrollo para beneficio de la población.

         Respecto a Moreno Valle, dijo que su partido tal vez no pudo actuar como partido de oposición durante su gobierno, para señalar errores y no apoyar la expedición de leyes como la llamada “ley bala” y otras. Eso lo vio como consecuencia de que el PRI nunca antes había sido partido de oposición en Puebla.