Columna | P U L S O   P O L I T I C O

          En el transcurso de esta semana,  hay quienes afirman que hoy, el Congreso del Estado habrá de designar al gobernador interino de Puebla, para llenar el vacío dejado por la gobernadora constitucional Martha Erika Alonso, fallecida junto con su esposo el ex gobernador Rafael Moreno Valle, en accidente de helicóptero ocurrido el pasado 24 de diciembre.

           El interino cubrirá el espacio que haya entre la convocatoria a elecciones constitucionales y la realización de éstas. Será un periodo de seis meses aproximadamente.

           La tardanza del Congreso local en realizar este trabajo, se debió en gran parte a la inexperiencia de los diputados de la fracción mayoritaria, Morena, que además, querían que a fuerza, el gobernador interino surgiera de las filas de su partido y fuera uno de los diputados locales que son los que tienen que elegir. Los panistas por su parte quieren que el interino de Martha Erika, sea panista.

            Mucho tiempo se perdió en convencerlos de que eso sería incorrecto, que no podían ser juez y parte y que además lo democrático, lo adecuado, sería que fuera un representante de la sociedad civil, que aun cuando hubiera sido político importante en otros tiempos, estuviera prácticamente retirado, pero que además de contar con la confianza de los ciudadanos, fuera un conocedor del manejo de la administración pública.

           Los nombres de Guillermo Pacheco Pulido, de Héctor Jiménez y Meneses, de Antonio Tenorio Adame y muchos más, hasta hacer una lista de más de cincuenta, están ya registrados

            Muchos tienen trabajo social reconocido, trabajo cultural y educativo, son personas comprometidas con la entidad, con su municipio, con su comunidad. Pero también hay muchos que nadie sabe de donde salieron, ni las razones por las que aspiran a un cargo tan importante.

             Esta semana ya se sabrá el nombre del agraciado, pues no puede seguirse posponiendo la designación, ya que la elección constitucional de gobernador, está fijada para el primer domingo de julio próximo.

             La Maestra, doña Elba Esther Gordillo, quien fuera líder del democrático Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación y estrecha colaboradora de los gobiernos priístas que vinieron desde Carlos Salinas de Gortari, hasta Ernesto Zedillo y después pasó a servir a los intereses de los gobiernos panistas de don Vicente de Fox y Quezada y de don Felipe de Jesús Calderón Hinojosa. Que fue detenida por delitos que resultaron falsos en el sexenio de Enrique Peña Nieto y fue liberada poco antes de finalizar el periodo del mencionado ex presidente, Se prepara para crear un nuevo partido que será propiedad familiar, como lo fue el PANAL, que en el pasado proceso electoral perdió su registro al no alcanzar el 3 por ciento de la votación.

           El nuevo partido que se llamará “Redes Sociales Progresistas”, será familiar, como lo fue el PANAL, y tal vez como éste, también pierda su registro por falta de miembros, pues ni los maestros afiliados al SNTE, el sindicato magisterial que también fue propiedad de la familia Gordillo, se afiliaron al partido político de la maestra.

           Los familiares han dicho que su nueva organización estará con Morena y el presidente Andrés Manuel López Obrador. Faltará saber si Morena y el Presidente aceptarían a aliados tan oportunos.

             En política todo puede suceder. Hay personas que después de lo ocurrido, creen que sigue vigente en Puebla el “morenovallismo”, aunque quien fuera el segundo de a bordo, Eukid Castañón, haya renunciado ya no solo al “morenovallismo, sino a la política en general y que esa corriente haya quedado totalmente anulada.

             El “morenovallismo”, no fue una corriente ideológica, ni política, ni nada que se le parezca.

              Fue un grupo de amigos del ex gobernador Rafael Moreno Valle, que lo siguieron en su afán de llegar a ser  candidato del PAN a la Presidencia de la República.

             El ex presidente Felipe Calderón dijo, que “era una pandilla de gentes que pretendían adueñarse del PAN, para satisfacer sus fines personales o de grupo”.

             Al fallecer el jefe de ese grupo, que no era reconocido por muchos ni como panista, se acabó el “morenovallismo”, pues no solo lo representaba, sino que lo encarnaba.

               Últimamente se empezó a hablar de que el ex gobernador de Puebla, estaba muy interesado en lograr una alianza PRI-PAN para próximos procesos electorales.

                No hay que olvidar los orígenes priístas de Moreno Valle y las relaciones de amistad entre las familias del ex gobernante poblano y los Hank González, Hank- Roon, Antonio Meade y últimamente con Osorio Chong y Enrique Peña Nieto.