Domingo, 20 Enero 2019 12:27

Obligaciones Colectivas

Columna | Algo Más Que Palabras

“Universalizar la educación tiene que ser la mayor de las prioridades”.

    Fruto de ese destino común, al que todos estamos llamados a transitar por él, germinan una serie de responsabilidades colectivas, a las que no hay que temer, pero si ponerse en acción, con determinación firme y perseverante, lo que nos exige también una vigilancia activa y eficaz, para que todos podamos avanzar, creciendo en dignidad y en respeto fundamentalmente. En consecuencia, si sustancial es favorecer el acceso a los bienes del espíritu, también es prioritario romper el ciclo de pobreza que deja rezagados a millones de niños, jóvenes y adultos, a los que no se les da oportunidad a desarrollarse en el aprendizaje de la vida.

A propósito, el titular de la ONU, acaba de señalar que la economía y la tecnología han provocado actitudes de desolación. En verdad, mucha gente se mueve sin esperanza alguna, camina a la deriva, desorientada, a merced del pánico, los nacionalismos y el populismo. Evidentemente, la mejor protección contra este recelo es que los Gobiernos respondan a esos temores y ansiedades y que lo hagan mediante la cooperación y el multilateralismo; sabiendo que el pilar educativo, de predicar con el ejemplo, es el mejor referente para toda la humanidad.

    Hoy las palabras ya no son suficientes, hemos de poner coraje y ser más eficaces en la reivindicación de nuestros valores, que son los que realmente nos hermanan. Urge, como jamás, movilizar todos los sectores sociales del mundo para abordar problemas tan graves, como la incitación al odio, la xenofobia y la intolerancia. Indudablemente, la urgente respuesta al problema requiere de un plan de acción global. Esta responsabilidad no tiene fronteras. Desde luego, es básico que todos nos comprometamos, según el ámbito que nos corresponda, y trabajemos unidos para huir de la desconfianza entre semejantes, precisamente para frenar la lucha y la venganza entre nosotros y recobrar, de este modo, el amor mutuo y la concordia. No es cuestión de engañarse unos a otros, sino de ayudarse, de ver que el vínculo de la unión social es lo que nos hace ser una sociedad solidaria y humana. Pensemos, entonces, que educar no sólo es transmitir conocimientos, sino modos y maneras de ser, de actuar, y de vivir.

A mi juicio, universalizar la educación tiene que ser la mayor de las prioridades. Es tan importante como respirar, un motor clave para la inclusión, para poder desarrollar la confianza y la seguridad en uno mismo, en nuestras capacidades y en su potencial, en la importancia de las tareas y decisiones que, sin duda, nos van a afectar positivamente. Instruirse, sabemos que es un derecho humano, un bien público, pero hacemos bien poco aún porque sea una realidad en el plano mundial. Sólo así podremos transformar este deshumanizado planeta en mejoras significativas para toda la especie. El mundo de la traición se gesta precisamente en la cobardía, en nuestra propia fragilidad humana. Por eso, es vital  no dejarse vencer por el miedo y la desesperanza, sino que con entusiasmo vayamos hacia adelante como constructores de caminos nuevos, sin entornos frágiles y vulnerables. Y esto se alcanza, con el lenguaje más eficaz para cambiar el mundo, la formación integral de la persona.

Naturalmente,  hemos de lograr que los sistemas educativos funcionen para todos a fin de no dejar a nadie en la exclusión. No olvidemos que únicamente en conjunto es como se avanza en principios, en la perspectiva humanística, comprometiéndonos colectivamente en actuar en este sentido. Una obligación que nos incumbe a todos,  y aún más a las autoridades políticas de cada Estado y a la Comunidad Internacional, en vista a elaborar una respuesta contundente que nos mundialice, principalmente orientada en un modelo de avance que ponga en el centro de toda existencia al propio ser humano, a través de una dirección más considerada con la creación y con su propia historia. Ojalá, pues, aprendamos del pasado, y no hagamos más distinciones entre ciudadanos. Cada cual tiene su misión. Es cuestión de hacerse piña; y, por ello, acusarse a uno mismo puede ser un buen comienzo, al menos demuestra que el sistema educativo ha funcionado.

Víctor Corcoba Herrero / Escritor
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Jueves, 07 Diciembre 2017 19:53

Puebla necesita gente como Deloya: CROC

Puebla necesita gente como Memo Deloya, convencida del trabajo y que conozca cómo resolver los problemas, enfatizó el Secretario General de la Confederación Revolucionaria de Obreros y Campesinos (CROC), Isaías González Cuevas, quien aseguró que el poblano, es un político experimentado, joven y preparado; convencido de servir, ayudar, atender y dar razones a la gente.

Durante el Encuentro político PRI-CROC Puebla, el también senador González Cuevas destacó el desempeño que tuvo Guillermo Deloya Cobián al frente del Instituto de Capacitación y Desarrollo Político (ICADEP), al revolucionarlo y formar cuadros destacados, por lo que no dudó en manifestar el apoyo de la Confederación para el joven político poblano.

Al término del evento, Deloya Cobián recibió el saludo de cientos de croquistas que abarrotaron el auditorio de la sede en Puebla y manifestó su interés para responder al apoyo de la organización obrero campesina, ya que dijo, “nunca he renunciado a mis aspiraciones en Puebla; Puebla es mi ciudad, mi estado  y por supuesto –agregó- es muy honroso este tipo de menciones, con las cuales, más que un privilegio, es una mayor responsabilidad”, dijo.

Al ser cuestionado en torno a las encuestas, Deloya Cobián indicó que hoy, éstas (las encuestas), no son un factor de decisión, por lo tanto, es necesario poner a la vista el perfil personal, la trayectoria y la posible suma positiva de una elección que será muy difícil.

En el Encuentro Político, también estuvieron los secretarios generales del Comité Directivo Estatal del PRI, Rocío García Olmedo  y de la CROC en Puebla, Mario Arroyo Tenorio, así como los presidentes municipales de Huejotzingo, Carlos Alberto Morales Álvarez y de Coyotepec, Alfredo Rodríguez Ocaña, y los regidores del municipio de Puebla, Karina Romero Alcalá e Iván Galindo Castillejos, entre otros.

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•    Con estas acciones inicia el Compromiso 21 con la presencia del gobernador en el interior del estado para la atención de la ciudadanía

Teziutlán, Puebla.- El gobernador Tony Gali reiteró que su administración será de proximidad, para llevar los servicios a las siete regiones del estado y resolver las necesidades de los habitantes. 

Al inaugurar la Caravana de Progreso y la Feria del Empleo en este municipio, como parte del Compromiso 21: Gobierno cercano a la gente, que comprende la presencia del gobernador en el interior del estado para la atención de la ciudadanía, señaló que trabajará de "afuera hacia adentro" en beneficio de la población.    

Informó que participaron 30 empresas que ofertaron más de 500 empleos para jóvenes, profesionistas, personas de la tercera edad y con alguna discapacidad, lo que permitirá fortalecer el dinamismo económico. 

Tony Gali destacó la importancia de brindar certeza jurídica y seguridad patrimonial, por lo que entregó títulos de propiedad, además de actas de nacimiento para que los ciudadanos se identifiquen como poblanos.  

Asimismo, anunció una importante inversión de 25 millones de pesos para garantizar el acceso y el abastecimiento de agua potable a los teziutecos. 

Durante la jornada, la Secretaría de Salud ofertó de manera gratuita mastografías y atención médica dental; asimismo, el Sistema Estatal DIF participó con Puebla Nutrida y el servicio de registro civil.  

Mientras que las Secretarías de Infraestructura, Movilidad y Transportes, Desarrollo Social y Educación Pública instalaron módulos de expedición de licencias, apoyo a la vivienda, el taller de playera “Exprésate”, becas académicas y el programa “Sí a la vida”.  

La Fiscalía General del Estado brindó información sobre la alerta Amber y la atención a víctimas del delito; la Secretaría General de Gobierno otorgó orientación para la expedición de actas de nacimiento y la dirección de Protección Civil explicó las medidas de actuación en caso de presentarse alguna contingencia por fenómenos naturales.

Por su parte, la Secretaría de Cultura y Turismo promocionó productos artesanales de la entidad y el Instituto Poblano del Deporte realizó activaciones físicas. 

Asimismo, las Secretarías de Seguridad Pública y de Desarrollo Rural Sustentabilidad y Ordenamiento Territorial, así como la Defensoría Pública y Concesiones Integrales, brindaron información sobre diversos programas.

Asistieron al evento la delegada de la Secretaría del Trabajo y Previsión Social, Vanessa Barahona; los secretarios del estado Diódoro Carrasco, de la General de Gobierno; Martha Vélez, de Infraestructura, Movilidad y Transportes; Patricia Vázquez del Mercado, de Educación Pública; Michel Chaín, de Competitividad, Trabajo y Desarrollo Económico; Gerardo Islas, de Desarrollo Social; Roberto Trauwitz, de Cultura y Turismo; Rodrigo Riestra, de Desarrollo Rural, Sustentabilidad y Ordenamiento Territorial; Jesús Morales, de Seguridad Pública; José Villagrana, de  la Contraloría; así como Nadia Navarro, directora del Instituto Poblano de las Mujeres y el Presidente Municipal de Teziutlán, Antonio Vázquez, entre otros funcionarios.

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Miércoles, 21 Diciembre 2016 18:17

Momento de buenos propósitos

Artículo | Algo Más Que Palabras

    Me encanta esta coyuntura de buenos propósitos. Ojalá no fuese un tiempo pasajero y gobernase por entero nuestras vidas. Sin duda, deberíamos poner en práctica, ese retorno a la humildad, al acercamiento de la gente, algo que siempre nos engrandece las vísceras. En demasiadas ocasiones, andamos excesivamente perdidos, degradados e insatisfechos. Este fruto lo propicia en parte, nuestra propia altanería, nuestro endiosamiento y nuestro orgullo. Deberíamos ser más auténticos y transparentes, más de ese Niño que nos nace en el fondo de nuestras entrañas, más de alentarnos el espíritu unos a otros que de alimentarnos el cuerpo, pues cuando uno sacia el alma hasta el vivir se torna mucho más compasivo. En el fondo, no necesitamos nada más que sosegarnos y reencontrarnos con la autenticidad. Lo verdadero es lo que nos exige mirada pura y corazón abierto para acoger y no desechar, y así poder poblar un planeta más de todos y de nadie, con unos moradores conciliados en el amor, reconciliados consigo mismo.

    Es cierto que el momento actual nos aleja de ese verbo conjugado con la luz, pero nos distancia porque nosotros así lo queremos, con nuestras incoherencias en el camino, con nuestras contradicciones de no saber escuchar, con nuestras desuniones e irracionalidades diarias. Bajo este modo de vivir y con esta manera de ser, tan egoísta, nos cargamos cualquier esperanza. Llevados por las emociones nos olvidamos de lo transcendental, de hacer un espacio en nuestro interior, de buscar una ocasión para reflexionar, porque lo importante no son las comidas y las cenas, lo significativo es que tenemos que alegrarnos con los demás, que llorar con los demás; porque, por esta común calzada, tampoco puede ir uno solo, necesita acompasar y acompañar, sentirse alguien para el otro, convivir con el otro, y hasta ser para el otro el latido que necesita, la música que le ilusiona, el hombro que le sostiene. Pensemos que meditar es una forma de conocerse sabiamente. Y conociéndonos, creo que es un buena fórmula para poder cambiar. Sólo hay que volver al relato de ese Niño, al que nadie quiere acoger, obligado a nacer en un establo porque no había sitio en la posada. De ahí nace la inhumanidad, la deshumanización, la falta de estima por nuestra propia especie.

    Por tanto, los buenos propósitos, no pueden estar ligados a una fiesta de derroches, sino a  la tarea de albergar. Los creyentes deben saber que la genuina Navidad, no es un festín más, sino que es una etapa de interiores, de crecer bajo el referente de la pobreza de Dios, que se despojó de sí mismo, tomando la naturaleza de siervo. Los no creyentes han de saber, igualmente, que el real júbilo nace del compartir, del despojarse de uno mismo hasta enternecerse por dentro. Para desgracia nuestra, o sea, para dolor de todos, seguimos encerrándonos en nuestro yo y en el de los nuestros. Nuestras hospederías internas muestran una indiferencia total hacia esos migrantes que se han convertido en las principales víctimas de la trata por parte de los llamados comerciantes de esclavos del siglo 21. "Miles de hombres, mujeres y niños desaparecen de campos de refugiados en Europa y otras partes del mundo”, acaba de participar recientemente al orbe, el director del organismo de la ONU, quien subrayó asimismo la necesidad de una mayor cantidad de recursos para combatir ese delito. Desde luego, las autoridades deberían prestar mayor atención en proteger a cualquier poblado o población y condenar, con mayor firmeza, los atropellos de derechos humanos.

    Indudablemente, el mejor proyecto es el compromiso de cada cual de conservar ese ánimo místico, que nos hace más solidarios, cuando menos durante el mayor tiempo posible. En otro tiempo, los fuegos armónicos celestes y los elementos de la naturaleza, los pastores y los Magos de Oriente apiñados en una continua profesión de obediencia y respeto, dieron al mundo un anticipo de lo que el Creador obra en favor de los seres humanos y en la fortaleza de cada uno. Hoy, en el tiempo presente, también debe unirnos en esa promesa de ser constructores de bien, personas de paz. Pongámonos en el lugar del que sufre o está sin cobijo, por un instante. Justo, por eso, requerimos menos rearmes y más brazos extendidos para convertirnos en una familia, donde todos seamos reconocidos y rescatados para trazar ese itinerario de fraternidades. Nada de rechazos. ¡Siempre con la bondad en el bolsillo!. ¡Siempre!.

Víctor Corcoba Herrero / Escritor
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