Columna | P U L S O    P O L I T I C O

               El asunto del registro del Movimiento Antorchista de Puebla, como partido político local, ya está en el Tribunal Electoral y los interesados esperan que se resuelva en poco tiempo.

              No hay seguridad de que la resolución sea favorable, según afirma la doctora Soraya Córdova, pero si no lo es, su organización continuará su lucha hasta lograr el registro, “porque nos asiste la razón jurídica. Hemos cumplido con todos los requisitos con exceso. Los integrantes del Instituto Estatal Electoral,  saben que tenemos la razón, pues en las asambleas distritales, en la asamblea estatal, estuvieron presentes sus enviados.

             “El cargo que nos hacen, de no haber presentado a tiempo nuestra solicitud, es absolutamente falso. Si eso hubiera ocurrido, ni siquiera nos hubieran puesto los requisitos que nos pusieron y que cumplimos a cabalidad”.

             La doctora Soraya, que ha sido regidora, diputada local y diputada federal, cuando su organización estuvo en alianza con el PRI, afirma que son 300 mil poblanos los que demandan el registro del partido local promovido por Antorcha.

          Afirma que tienen organizados ya comités en 194 de los 217 municipios. No tienen presencia en los más pequeños, aquellos que tienen menos de mil, dos mil o tres mil habitantes, aunque sus simpatizantes están en toda la entidad.

          “Los partidos tradicionales, PRI, PAN, PRD, están destruidos o muy debilitados, no puede contarse con ellos y con Morena tampoco, pues no tiene una ideología que lo distinga, carece de estructura y de organización y las autoridades que han surgido de esa agrupación, están actuando sin sensibilidad política, sin sensibilidad social. Ese partido está lleno de oportunistas como hemos visto en el comportamiento de muchos de sus diputados y presidentes municipales, que en vez de ayudar a sacar adelante al país, estorban su pleno desarrollo. Ni siquiera han podido constituirse como un auténtico partido y han caído en vicios que han llevado a la ruina a los partidos existentes, como las divisiones internas y las disputas por los cargos de elección popular”

            “Tenemos buenos abogados especialistas en asuntos electorales, atendiendo nuestro caso y consideramos que si hay voluntad política de parte del gobierno federal para cambiar las cosas como ha prometido, vamos a ganar por la vía legal.

            “Si no fuera así, podemos conformar una alianza con los partidos existentes para dar la batalla electoral con el apoyo de los poblanos”.

             ¿Y ustedes creen, que los poblanos los van a apoyar? Preguntamos y la respuesta de la doctora Soraya fue contundente:

              “A Puebla la vamos a poner de pie los poblanos. Pero eso no va a pasar por arte de magia. Necesitamos organizarnos en nuevos partidos, porque como ya dije, los existentes están destruidos o muy debilitados. Necesitamos organizarnos en nuevos partidos políticos y competir en las elecciones para cambiar las cosas.

               “La alianza partidista, de la que hablo, es una opción válida y posible, sobre todo porque Morena no está organizado, ni se le ven intenciones de hacerlo. Ellos creen que podrán eternizarse en el poder y ya deberían estar conscientes de su realidad”.

               Hay quienes critican al gobierno federal porque no ha hecho un gran escándalo con motivo del Coronavirus-19. Ellos quisieran que ya se hubieran cerrado las escuelas, que se prohibieran los vuelos internacionales en nuestro país, pero sobre todo, que el Presidente López Obrador, ya hubiera suspendido sus “mañaneras” y sus giras por el interior de la república, que es lo que más les preocupa.

              Pero la realidad es que la forma en que se ha abordado este problema, ha sido la mejor: nada de escándalo, nada de aspavientos, nada de histeria colectiva. Información constante y veraz, acciones preventivas por si acaso el virus se extiende. Capacitación a médicos y enfermeras para actuar con rapidez y eficiencia en caso necesario y preparar espacios especiales en clínicas y hospitales, para atender a los enfermos, en caso de requerirlo.

          En el gobierno de Felipe Calderón, la población cayó en pánico por la mala actuación de las autoridades: todo mundo se sentía obligado a usar un tapa boca, por la “epidemia” de la influenza, que según decían, nos amenazaba. Y no pasó nada. Hicimos el ridículo, aunque eso sí, toda la movilización que se llevó a cabo, costó una millonada de la que muchos sacaron raja, como se acostumbraba en esos tiempos.

           Tenemos todavía la llamada “influenza estacionaria”, ha habido brotes de sarampión y se dice que esos males, son más expansivos y peligrosos que el coronavirus-19. Los casos surgidos últimamente se están atendiendo y no ha pasado gran cosa.