Columna | P U L S O    P O L I T I C O

         Nos llega la noticia de que la organización antorchista, que tiene fuerza en varias regiones del estado y de otras partes del país, está en tratos para una alianza electoral para las próximas elecciones, con el partido Movimiento Ciudadano, que actualmente gobierna los estados de Jalisco y Nuevo León. Al parecer las negociaciones van por muy buen camino y es muy posible que esa alianza se logre.

         Por carecer de registro como partido político, aunque tiene mejor estructura, organización, disciplina y unidad interna que muchos partidos, el Movimiento Antorchista se alió durante varios años al Partido Revolucionario Institucional, que pese a que éste partido se beneficiaba con dicha alianza, varios de sus líderes mostraban su rechazo a la organización que empezó siendo campesina y que evolucionó organizando a las clases populares de las medianas y grandes ciudades.

         El rechazo era porque algunos líderes priistas, sentían en peligro su liderazgo ante la buena organización de Antorcha, que siempre se mostró como una organización muy disciplinada y compacta.

        Antorcha quiso convertirse en un partido con registro local, aquí en Puebla y le pusieron numerosos  obstáculos legaloides para que no fuera aceptada su petición, pese a cumplir con todos los requisitos de ley.

       Sin duda que si se da la alianza con el partido Movimiento Ciudadano, el partido naranja, como le dicen popularmente, les dará buenos resultados, sobre todo en zonas rurales o semiurbanas donde Antorcha tiene fuerza.

        LA ALIANZA VA POR MÉXICO, CONFORMADA POR el PRI, el PAN y el PRD, se enfrenta a grandes problemas en Puebla: han perdido los tres partidos que por varios años fueron los más importantes del país, gran parte de su estructura; su organización se ha debilitado grandemente al grado de carecer de comités municipales en más de la mitad de los 217   municipios de Puebla.

          Sus principales líderes se han retirado o actúan muy discretamente al grado de que no se mencionan nombres como posibles candidatos a la gubernatura, a las presidencias municipales de Tehuacán, Texmelucan, Teziutlán, Huauchinango, Atlixco y otros de los más importantes.

          Ni priistas, ni panistas se quieren arriesgar como aspirantes, pues saben que sus partidos ya no tienen la solvencia ni política, ni económica de otros tiempos y que una candidatura sin ninguna o muy poca seguridad de triunfo, les haría perder tiempo, dinero y prestigio.

         El único que suena como posible candidato de la alianza Va por México, es el alcalde de la capital del Estado, Eduardo Rivera Pérez, que llegaría muy desgastado por los errores que ha cometido y sigue cometiendo al frente de los destinos del municipio más importante de la entidad.

             COMO BUEN PANISTA, EL SEÑOR RIVERA PEREZ, busca ingresos para el ayuntamiento por todos lados y sus obras más importantes, como las del primer gobernador panista de Puebla, son adornos en algunas partes de la ciudad, sin ninguna trascendencia, como esas estatuas metálicas que hay en algunas bancas de parquecitos y jardines de personajes supuestamente importantes de Puebla (algunos lo fueron) pero nada que resuelva los graves problemas que se confrontan en colonias y barrios populares, como la falta de drenaje, del servicio de agua potable, el arreglo o construcción de escuelas de campos deportivos, en fin. No hay que olvidar en hace unos cuantos años, el INEGI informó que la ciudad de Puebla, era una de las capitales del país, con mayor número de pobres.

          Y en esta ciudad, con el mayor grado de pobreza, se levantó una rueda de la fortuna que no funciona por estar descompuesta; un museo internacional del Barroco, de multimillonario costo, que nadie visita: unas ciclo- pistas elevadas, que casi nadie usa y unas rejas en parques y jardines, que se ven bonitas pero que no eran necesarias y además tuvieron un elevado costo,

             EN SUS VIDEOS PROMOCIONALES QUE SE TRASMITEN por televisión, los panistas presumen que gobiernan al estado de Yucatán, el estado más seguro y tranquilo del país, pero no dicen que Guanajuato es gobernado por panistas desde hace varios sexenios y es uno de los estados más violentos e inseguros de México; que también gobiernan Chihuahua y Tamaulipas entidades que están consideradas como de las más peligrosas de México; que la violencia en Michoacán, se agravó muchísimo, durante el periodo de Felipe Calderón como Presidente de la República, michoacano él, que no supo controlar la situación y que ese gobierno nacional panista, tuvo como secretario de Seguridad del país, a un cómplice de uno de los grupos mafiosos más fuertes y peligrosos de México.

        EN FIN. ES POSIBLE QUE EL CANDIDATO A LA GUBERNATURA, de la alianza PRI, PAN, PRD, sea don Eduardo Rivera Pérez, que ya desde ahora, con más de un mes de anticipación, se sabe que será invitado por el gobernador Barbosa Huerta, a dar el grito de Independencia en Casa Aguayo. En tiempos del señor Moreno Valle Rosas, se daba el lujo de ningunear al alcalde, el mismo señor Rivera Pérez, en el palacio municipal y llevar al frente, como compañero para dar el grito desde el balcón de dicho palacio, al senador panista Javier Lozano Alarcón, Ni el gobernador de entonces era un auténtico panista, ni el senador tampoco. Rivera Pérez, siempre ha sido del partido conservador, desde sus tiempos de estudiante universitario. Asi es esto de la política.