Después de darse a conocer los resultados de la consulta para la Revocación de mandato organizada por el INE el domingo 10 de abril al filo de las ocho de la noche de acuerdo a los resultados preliminares. El país estará atento a los números finales, entre tres bloques: los que votaron a favor de la continuidad del Presidente para que siga en el cargo; los que votaron porque no continúe y quienes se abstuvieron de participar en el ejercicio, convencidos de que se trató de una farsa solo útil al Presidente para confirmar sus niveles de popularidad y justificar las decisiones que vendrán en los próximos meses en su gobierno.

Uno de los aspectos más relevantes del ejercicio, será conocer el nivel de participación que haya podido alcanzar la consulta para saber si es válida y por otra parte el número de votos a favor de la continuidad del Presidente, que motivó el desacato de sus funcionarios tanto del gabinete, de los gobiernos estatales y municipales a la prohibición del Tribunal electoral del Poder Judicial de la Federación de no realizar actos proselitistas a favor de la consulta de acuerdo a lo que establece la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, ante su desesperación por la indiferencia de millones de mexicanos que han manifestado no tener interés en el ejercicio.

Dichas violaciones a la ley por parte del aparato de Estado, no solo pone en riesgo la legalidad del resultado de la consulta; sino además podría derivar en su anulación por las violaciones cometidas en todo el proceso, lo que sería un pretexto ideal para el Presidente para lanzarse en contra del INE y del Tribunal Electoral del poder judicial de la Federación quienes resolverían al final la validez o no del resultado en caso de que fuera impugnado.

Solo de no conseguirse los 37 millones de votos que darían validez a la consulta, no tendría sentido impugnar su validez ya que no surtiría sus efectos, pero de todas formas el Presidente tendría el pretexto para culpar al INE de la falta de promoción al ejercicio y de haber bloqueado con su actuación la participación ciudadana.

En resumen, los culpables del resultado ya están ubicados y las consecuencias se darán a partir de la reforma electoral con su desaparición.

En el improbable caso de que se obtengan los votos suficientes para dar validez al ejercicio y lo gane el Presidente, si la tendría difícil porque no podría culpar al INE, más que solo de que debieron llegar más votos, pero ello no significará que los perdone o desista de su idea de desaparecer al organismo.

Lo que, si aseguro desde ahora, es que cuál sea el resultado, AMLO ahora si anunciara otra serie de medidas y vendrá un mayor aumento de la inflación y las gasolinas, que ha estado deteniendo hasta que pasará la revocación de mandato. Sino, al tiempo.

Director General del Instituto de Ciencias Jurídicas de Puebla A.C.