Columna | En pocas palabras

¿Fue necesaria la revocación de mandato impulsada por el Presidente Andrés Manuel López Obrador y promovida de una manera insultante por Morena y los funcionarios de los tres niveles de gobierno, surgidos del mismo partido?

No. Solo fue un capricho del poder. El fracaso se dio porque fue eso: capricho por una inquietud para saber qué hacer hacia 2024 ante el descenso de su popularidad, personal, y lo errático del gobierno, y seguir adelante con su cuarta transformación.

Mucho antes del 10 de abril, se sabía, aun cuando el resultado le fuera adverso al ejecutivo federal, este seguiría en su cargo hasta el último día del mes de septiembre de 2024. Nunca se llegaría a los poco más de 37 millones de votos -40% del Listado Nominal- para cumplir con el requisito de este ejercicio de Revocación de Mandato. El resultado está a la vista. Que desperdicio de recursos. Sólo participó el 18 % de los electores que se alejaron de las urnas, de acuerdo al conteo rápido del Instituto Nacional Electoral –INE- poco menos de 17millones de los 92 millones de votantes. De esos 17 millones de personas que sufragaron, más del 90%se pronunciaron porque  el licenciado Andrés Manuel López Obrador, siguiera en la Presidencia de la República. El resultado final se dará a conocer la noche de este lunes.

Que sigue. El embate al INE, donde en diciembre próximo habrá cambio de consejeros, Lorenzo Córdova Vianello y Ciro Murayama Rendón, los más señalados por ya saben quién y sus asociados, de servir a los conservadores y no en favor del pueblo. Vendrán denuncias declaraciones y todo lo que implica después de una elección, que la revocación de mandato no fue elección, pero hay que echar culpas, críticas y mentiras, olvidando esos mandamientos de: “no mentir, no robar, no traicionar”.

La autoridad electoral y los ciudadanos que participaron como funcionarios de casillas cumplieron con sus respectivas responsabilidades. El electorado también manifestó su sentir y por los resultados, hasta el momento, hay un descontento con la administración federal del Presidente López Obrador y contra los mandatarios estatales morenistas, incluyendo a los militantes de ese Movimiento. Solo las cúpulas de ese partido festinan…”no mentir, no robar…”

Algunas cifras: En Puebla el porcentaje de  participación de votantes -741,719-  fue del 19.68%, de los más de 4 millones de ciudadanos inscritos en el listado nominal…

La sociedad, que no el pueblo de ya sabes quién, dio su veredicto. Es la sociedad que va delante de todos los partidos de oposición y el de gobierno.  

Esta “Semana Santa”, que llenaron de política, manifestaciones, sesiones de diputados federales, reforma eléctrica, revocación de mandato, reforma electoral, servirá para que  prepare acciones futuras, necesarias, para ahora sí, hacer los cambios que se requieren para que este país avance y no retroceda…ante la poca acción de los partidos. Felices vacaciones...Hasta la próxima…D.M.